FÚTBOL | TURQUÍA
El Besiktas estrenó su estadio entre caos y gas lacrimógeno
La policía de Turquía ha arrojado botes de gas lacrimógeno a aficionados que acudían al partido de inauguración del nuevo estadio del Besiktas en Estambul.
La policía de Turquía ha arrojado botes de gas lacrimógeno a grupos de aficionados que acudían al partido de inauguración del nuevo estadio del Besiktas en Estambul, un recinto con capacidad para 42.000 espectadores que quedó abarrotado en sus alrededores horas antes del encuentro frente al Bursaspor.
Según la prensa local, no ha quedado claro por el momento el motivo por el que la policía dispersó a la muchedumbre, entre los que había niños. Las autoridades establecieron un perímetro de seguridad y bloquearon el tráfico. Varios testigos afirman haber visto nubes de gas lacrimógeno. Coincide con un endurecimiento en las medidas de seguridad de la ciudad del Bósforo después de varios atentados efectuados en las últimas semanas por el autodenominado Estado Islámico y el partido del Kurdistán.