La hora del relevo en la portería
Del Bosque dio el paso y eligió a De Gea como portero titular en Italia. Iker Casillas dijo en Rumanía que su retirada “está cerca”. No hay transición dulce.
De Gea apunta a titular con España el 13 de junio, en Toulouse, ante la República Checa. Faltan más de tres meses para que comience la Eurocopa, pero Del Bosque ya ha enviado una señal clara. Al elegir a De Gea contra Italia le ha situado por delante de Casillas, quien tras jugar ante Rumanía admitió en twitter que su retirada “está cerca”. Tan cerca como dure España en la Eurocopa. Después se irá.
El seleccionador le ha dado a De Gea dos partidos señalados. El último de la fase de clasificación para Francia 2016 y el del amistoso de Udine ante la squadra azurra. Suficiente para lucir los galones de titular.
Del Bosque no pega puntada sin hilo. Hay que juzgarle siempre más por sus hechos que por sus palabras. Dijo que esperaba “una transición dulce en la portería”, pero es el primero que sabe que no es así. Casillas y De Gea mantienen una relación profesional, pero fría donde el punto en común más fuerte es la competencia. La situación recuerda a la que el propio Casillas vivió con Cañizares cuando le relevó en la Selección, en la Eurocopa de 2004, pero al revés. Hasta que saltó, harto de las preguntas sobre la rivalidad en la portería: “Vamos a pensar en la Eurocopa y que juegue quien juegue. España somos todos”. Y siguió: “Cuanto más bueno eres con la gente, más hostias te dan. En cambio, si eres un cabronazo, mucho mejor”.
Casillas, que en mayo cumplirá 35 años, eligió jugar en una Liga menor, la de Portugal. Ahora tendría más fuerza si estuviera en un gran club de la Premier (tuvo una oferta del Arsenal). En el Oporto ha recibido 34 goles en 35 partidos. Alguno de ellos fue estrambótico y se convirtieron en memes que circularon por las redes sociales. Lo mismo le pasó a De Gea con su episodio del fax. David de Gea tiene 26 años y juega en el United, en el que también lleva una campaña irregular y en el que ha recibido 37 goles en 38 partidos. En Kiev y Udine, sus dos últimos partidos como titular con España, fue el mejor del equipo.
Un exportero internacional que prefiere que no salga su nombre resumió la situación al regreso de Transilvania. “No hay mayor rivalidad que la que existe entre los porteros. Ellos no son una línea como los defensas, los medios o los delanteros. Ellos están solos y sólo juega uno”.