Aurier se enfrenta a una fuerte sanción e incluso al despido
El lateral, que llamó "mariquita" a Blanc, entre otras críticas a compañeros del equipo, ha comparecido durante hora y media ante la dirección del club.
El lateral marfileño Serge Aurier compareció durante una hora y media este lunes ante el responsable deportivo del París Saint-Germain, Olivier Létang, y la dirección de recursos humanos, tras haber insultado en las redes sociales a sus compañeros y al entrenador, Laurent Blanc, aunque el club aún no ha manifestado qué decisión ha tomado en torno al jugador.
Según los medios locales, Aurier se enfrenta a una fuerte sanción que puede ir desde la multa económica al despido. El club señaló que en los próximos días comunicará su decisión al jugador, tal y como establece la legislación francesa.
A través de una red social de retransmisión en directo de vídeos, Aurier llamó el pasado día 13 "mariquita" a Blanc, cuestionó la autoridad del sueco Zlatan Ibrahimovic en el vestuario, calificó de "guiñol" al argentino Angel di María y consideró que el portero suplente Salvatore Sirigu está "quemado".
Según diversos medios, el jugador explicó el contexto de los insultos, reiteró su arrepentimiento, pidió perdón y afirmó ser consciente de la enorme proporción que tomaron sus palabras.
La televisión 'BFMTV' descartó que el club piense despedirle, porque su valor en el mercado ha ido creciendo a medida que se ha hecho con un puesto de titular en el once de Blanc y clubes ingleses como el Chelsea o el Manchester City puede pagar 25 millones de euros por el futbolista de 23 años.
La opción que cobra más peso es que el jugador sea apartado otras tres semanas suplementarias, el máximo tiempo que permite el código del fútbol francés, antes de que reintegre la plantilla en la recta final de la temporada, cuando el PSG se jugará los títulos. En las últimas horas, según ese canal, el defensor ha hablado con algunos de sus compañeros para excusarse de forma directa. En particular, Aurier ha recibido el apoyo del centrocampista Blaise Matuidi, amigo personal del marfileño y considerado uno de los pesos pesados del vestuario. "Es mi amigo y es amigo de todo el vestuario. Todo el mundo le aprecia. Sabemos que ha cometido un error, es algo humano, ha pedido perdón (...). Le necesitamos en el campo y fuera", dijo Matuidi tras la victoria de su equipo el pasado sábado contra el Rennes.
Blanc, que confesó que le habían sentado muy mal las palabras de Aurier, a quien consideró "un desagradecido", afirmó que tendrá una entrevista con el jugador y no le cerró las puertas del vestuario. Resta por ver si los otros líderes del equipo, como el sueco Ibrahimovic, el argentino Di María o el brasileño Thiago Silva, también están de acuerdo con el retorno del futbolista.