El cañón de Cristiano Ronaldo o el efecto Luciano Spalletti
Siete goles del portugués y de Benzema con Zidane. Marcelo e Isco apuntan a titulares; Nacho puede entrar por Varane. El Roma puede jugar sin nueve.
-
- Partido de la Liga BBVA Barcelona vs Real Madrid en Directo.
El Madrid vuelve a su casa, la Champions, competición que tantas veces (diez, más que a nadie) le sentó como un guante, en un indescifrable cruce de efectos. El de Zidane, con propiedades calmantes en el Madrid. El de Spalletti, también saludable para el Roma. Y el de Cristiano, profundamente estimulante para sí mismo. Nadie ha metido más goles que él en la competición (88), nadie ha metido más goles que él en una edición (17 que llevaron a la Décima). E iguala este curso los once que suma todo el Roma. De ahí que replicará desafiante a una pregunta sobre su falta de eficacia fuera desde noviembre. Apeló a la contabilidad general en un canto al gol (propio), que no a la amistad: “No necesito besitos ni abracitos. Tampoco cenar con Benzema. Importa lo que pasa en el campo”.
Hoy topará con un equipo de cimas y simas que, como el Madrid, despidió a su entrenador, Rudi García, para volver al pasado, Luciano Spalletti, que ya pasó cuatro años de bienes en el club y que se marchó en 2009, cuando, tras dos derrotas, le llegó que la presidenta, Rosella Sensi, sondeaba a Ranieri. Ahora ha regresado por aclamación y suma cuatro victorias consecutivas y poco significativas: ante Frosinone, Sassuolo, Sampdoria y Carpi. Falta por ver si el estirón conduce a la estabilidad, porque el equipo llegó a ser líder de la Serie A, luego encadenó una devastadora racha de una victoria en doce partidos, cayó en la Copa con el Spezia y se metió en los octavos de Champions con un triunfo en seis partidos. En parte lo explica la llegada de quince jugadores nuevos del verano a aquí. Los tres últimos, en enero: Zukanovic, El Shaarawy y Perotti. Sólo el último apunta a titular si, como parece, Spalletti se inclina por la versión más atrevida, la de poner a Dzeko, cuyos seis goles en 26 partidos no resultan intimidatorios. También podría ahorrarse el nueve y tirar de El Shaarawy. El peligro, en cualquier caso, está más atrás. En Salah, un jugador egipcio cedido por el Chelsea y con un toque creativo muy apreciado. Y también resulta inquietante Pjanic, que con un gol en el Bernabéu despidió al Madrid de Pellegrini de la Champions en 2010. Tenía entonces 19 años y menos cuajo que hoy.
No parece, en cualquier caso, adversario capaz de tumbar al Madrid, aunque depende de cómo sople el viento. Fuerte y de cola en el Bernabéu, racheado y de cara en las salidas desde la llegada de Zidane, que recupera a Marcelo, lateral de valor incalculable porque no tiene relevo y porque ningún otro en el mercado ofrece su profundidad. Así que con él y con Carvajal el Madrid se hará ancho. Con Isco, de nuevo titular, tendrá más luces. Y con Cristiano y Benzema se cargará de gol. Siete ha marcado cada uno en los seis partidos dirigidos por Zidane, que anoche probó con Nacho como pareja de Ramos. No se sabrá hasta hoy si es decisión o simple aviso a Varane, víctima de sus catastróficas desdichas ante el Athletic. El Madrid empieza a sospechar que sólo le queda una bala y el blanco es móvil. “Diez minutos malos en la Champions te matan”, le gusta decir a Butragueño. Sabe de lo que habla.
Haz tu apuesta y gana 5€ por cada euro apostado con la victoria del Madrid en Roma.