Una lección fuera de sitio

Me llega desde Vitoria la noticia de que el Basconia perdió 8-1 el sábado ante el Alavés B, al que en la primera vuelta derrotó 5-1 en Artunduaga, un partido que seguí en directo y me dejó perplejo por la inferioridad notoria de los visitantes. Algo ha cambiado. Mermado por las lesiones y en clara regresión de competitividad, el segundo filial del Athletic está cayendo en picado: lleva siete derrotas en las diez últimas jornadas. El Alavés está hoy en la zona media-alta de una Tercera muy inferior a la del año pasado por los ascensos a Segunda B y el Basconia es decimocuarto.

 Lo que me deja aún más perplejo es enterarme de que el técnico de Lezama, Jose Luaces, sacó del campo a Guruzeta a falta de un cuarto de hora para que el equipo se quedase aún con mayor inferioridad que la del marcador. La justificación fue una tarjeta amarilla por protestar. El Basconia encajó dos goles más y me imagino que el técnico se vería satisfecho por la lección dada a un jugador que había descendido del Bilbao Athletic para ese partido.

 Estas decisiones que a menudo se auspician desde la dirección de Lezama me parecen una auténtica chorrada. Suceden a menudo en cadetes, infantiles… Desde ya, son una falta de respeto al rival, a sus compañeros, una humillación al futbolista que lo padece y, desde luego, lo más alejado que existe del fútbol profesional. Estamos hablando ya de un jugador que ha disputado cinco partidos en la Liga Adelante. ¿No hay diálogo en el día después para hacerle ver que se ha equivocado?

Prefiero las enseñanzas de puertas adentro. Me cuentan que al día siguiente de debutar con el Bilbao Athletic, Ziganda cogió en privado a Guruzeta, hijo de un ex de la Real: “No te creas que has estado tan bien como dicen los periódicos, en realidad no has hecho nada del otro mundo”. El delantero había hecho la conducción que llevó al golazo de Lekue y después pegó un poste. A eso le unió una interesante brega. No era moco de pavo para lo poquísimo que produce el filial, pero Guruzeta debía saber que era el inicio de un duro camino.

 Pues lo dicho, que el Basconia que hace poco se presentó a un partido con un solo cambio de campo y un portero juvenil de edad cadete, Christopher Atangana, da la nota. Supongo que de acuerdo con Lezama. Si las alineaciones llegan a veces a los vestuarios en avioncitos de papel, no sé si valorando cómo han entrenado los jugadores durante la semana, imagino que esta licencia estará bien vista desde los despachos, como cuando llega un central juvenil del Arenas, Murua, y en dos semanas es titular en el División de Honor desplazando a futbolistas que llevan entrenando desde julio en Lezama. En realidad, ha fichado ahora porque la Real Sociedad le pretendía. Ojalá sea un acierto.

Luis Enrique dejó a su equipo con diez en un final de partido copero ante el Villanovense por una lesión, con la eliminatoria ya ventilada, para evitar un percance a alguno de los titulares que tenía en el banquillo. También me parece desafortunado y recibió críticas.