Galca se sitúa entre Valverde, Pochettino y los infiernos
Ante la Real Sociedad, el técnico rumano puede superar el arranque en el banquillo de ambos técnicos o firmar el peor registro del siglo XXI en el banquillo del Espanyol.
El partido del próximo lunes ante la Real Sociedad se antoja tan determinante para el futuro inminente del equipo —quemarse en las brasas o alejarse del fuego— como para la credibilidad del entrenador. Constantin Galca, entre otras cosas, se juega estar en un promedio razonable de puntos o en el peor, al menos desde que arrancó el siglo, en el año 2000.
Cinco puntos ha sumado el técnico desde que aterrizó a mediados de diciembre, hace ahora siete jornadas. Empezó con una victoria ante Las Palmas (1-0), pero solo ha vuelto a arrancar dos empates —eso sí, ante Barcelona (0-0) y Villarreal 2-2)—, además de cuatro derrotas (contra Sevilla, Eibar, Getafe y Real Madrid). El calendario no le ha acompañado, hasta el punto de que el suyo es el segundo peor arranque de un técnico en lo que llevamos de siglo, solo empeorado por Luis Fernández, quien pasadas siete jornadas sumaba solo tres puntos y, sin embargo, acabó salvando al equipo. De hecho, no se cuentan en este balance ni a Juande Ramos, ni a José Manuel Esnal, ‘Mané’, pues solo llegaron a dirigir al Espanyol en cinco y seis jornadas, respectivamente.
Lo determinante del choque del lunes es que Galca necesita puntuar para no firmar el peor arranque del siglo, ya que Luis Fernández ya sumaba seis puntos después de ocho partidos de Liga en el Espanyol. Esa es la cara negativa. ¿La positiva? Que en caso de victoria ante la Real Sociedad, el rumano no solo evitaría ser el peor, sino que de golpe superaría a dos entrenadores que marcaron una época en el equipo perico: Ernesto Valverde y Mauricio Pochettino. Ambos acumulaban siete puntos tras sus ocho primeras jornadas en el banquillo.
El hispanoargentino salvaría aquel 2009 una situación mucho más dramática que la actual, mientras que el ‘Txingurri’ alcanzó nada menos que la final de la Copa UEFA en el curso de su debut. Inalcanzable, eso sí, es el arranque en 2000 del ‘maestro’ de Galca, Paco Flores, con 12 puntos en sus primeros ocho partidos. Luego llegó la Copa.