El Hiroshima golea al Mazembe y se verá las caras con River
El Hiroshima mejora así su participación en la edición del Mundial de Clubes 2012, en la que acabó quinto. Jugará ante River Plate el miércoles a las 11.30.
El Sanfrecce Hiroshima nipón goleó hoy al TP Mazembe congolés (0-3) en el segundo cruce cuartos de final del Mundial de Clubes de Japón 2015, y se medirá el próximo 16 de diciembre con el River Plate argentino, que aguarda en semifinales.
Los primeros compases del encuentro fueron enérgicos, con ocasiones en ambas áreas. Tras el desenfreno inicial, la escuadra congolesa logró imponer en cierta medida su ritmo, con el conjunto nipón algo más agazapado y buscando las cabalgadas de Sato a la contra.
Al cuarto de hora Samatta se plantó solo ante Hayashi y fue derribado dentro del área por Aoyama, pero el arbitro no vio la infracción. Respondieron los locales con un contraataque que citó a Sato con Ghohouo, pero el veterano delantero, un tanto forzado, disparó muy alto.
Los nipones se envalentonaron algo más hacia el final del primer acto y así, a un minuto del descanso, Sasaki aprovechó un córner botado desde la derecha para peinar hacia el centro del área y dejarle el gol a Shiotani en bandeja.
"Los cuervos" del Mazembe salieron más decididos a buscar portería tras el descanso pero el Sanfrecce, disciplinado y generoso en los apoyos, aguantó con firmeza.
En seguida los africanos parecieron perder intensidad física y los de Hiroshima aprovecharon de nuevo un córner para hacer diana, en esta ocasión con un cabeceó impecable de Chiba. A partir de ahí el Mazembe apenas pudo romper el orden defensivo nipón y solo una internada del maliense Traore y un cabezazo desviado del tanzano Samatta inquietaron a Hayashi.
El Sanfrecce también dispuso de un par de ocasiones en las botas de Douglas antes de que un envío en largo dejara solo en el flanco derecho a Mikic, cuyo centro cabeceó a gol el recién incorporado Asano.
El Hiroshima mejora así su participación en la edición del Mundial de Clubes 2012, en la que acabó quinto, y apea a un Mazembe que esperaba repetir o superar su actuación de 2010, año en el que alcanzó la final, pero que dio muestras de padecer en exceso el cansancio del viaje hasta Japón.
De este modo, los nipones buscarán hacer historia ante un River Plate con el que jugarán dentro de tres días en este mismo escenario de Osaka.