Dos goles de Higuaín colocan al Nápoles líder de la Serie A
El argentino y Reina fueron los grandes protagonistas en la victoria del Nápoles, que arrebata al Inter la primera posición de la liga italiana. Nagatomo fue expulsado en la primera mitad.
Mancini volvió a cambiar esquema, buscando la similitud con el consolidado 4-3-3 del Nápoles: el plan nerazzurro era bloquear el juego rival e intentar sacar el máximo provecho de cualquier ocasión concedida por los locales. El proyecto en este curso ya funcionó varias veces (como testimonian las siete victorias por 1-0) aunque esta vez Gonzalo Higuaín tardó apenas 64 segundos en obligar a los nerazzurri a cambiar su estrategia. El Pipita, con un potente derechazo, firmó el segundo tanto más rápido de esta temporada en el Calcio tras un pase con el pecho de Callejón (que aprovechó un error de Murillo), llegando a conseguir marcar en el San Paolo durante ocho jornadas consecutivas. El Capocannoniere de la Liga (con 12 dianas), marcando en el próximo partido casero (ante el Roma) alcanzaría el récord del club sureño, que pertenece, obviamente, a Diego Armando Maradona.
El golpe fue duro y el equipo de Milán tardó bastante en volver a organizarse, algo que el Nápoles, a pesar de su presión alta y de los toques rápidos típicos del juego de Sarri, no supo aprovechar (y no faltaron ocasiones para hacerlo). La Beneamata, entonces, empezó a dar señales de vida con una rosca zurda de Guarín que acabó fuera por poco, pero antes del descanso recibió otro leñazo: Nagatomo vio dos amarillas en ocho minutos por faltas a Callejón y Allan dejando a los suyos con diez.
El técnico nerazzurro tuvo que volver a dibujar a su equipo y decidió renunciar a un apagado Icardi, (sustituido por el lateral Alex Telles), poniendo a Ljajic de punta, mientras que el Nápoles empezó la reanudación con ganas de sentenciar el partido empujado por un calentísimo San Paolo. El 2-0 parecía inevitable y llegó en el 62' otra vez con Higuaín, que después de un testarazo de Albiol penetró la defensa visitante como cuchillo en mantequilla hasta batir a Handanovic con el pie derecho.
Con dos goles de ventaja y en superioridad numérica los de Sarri sintieron la hazaña acercarse y se empezaron a gustar demasiado: en el 67', tras una larga posesión del balón delante de su área, los azzurri acabaron perdiendo el esférico y Ljajic con una gran jugada personal firmó el 2-1. El gol dio nueva energía al Inter y asustó terriblemente al Nápoles, que incapaz de congelar el juego acabó sufriendo hasta el último instante: en el 94', increíblemente, el conjunto de Mancini golpeó dos veces el poste con un testarazo del recién entrado Jovetic y otro de Miranda, que Pepe Reina desvió milagrosamente en el palo. El San Paolo celebró la parada del meta español como un gol (con anuncio del speaker incluido) y al final pudo desatar su fiesta: nunca, desde la época de Maradona, la ciudad del Vesuvio pudo soñar con el Scudetto como en este momento.