La Gazzetta, a pies del Barça: “Los fuoriclasse de la sonrisa”
El diario italiano sella con datos el feliz momento del club azulgrana y hace un guiño a Luis Enrique, por sus datos y sus aportaciones al estilo.
“Los fuera de serie de la sonrisa. Divirtiendo a todos y divirtiéndose”. A toda página, en una crónica escrita por su corresponsal en España, Filippo Ricci, La Gazzetta dello Sport recogió este jueves los ecos del fabuloso 6-1 del Barcelona al Roma que se concatenó con la exhibición en el Bernabéu. Un Barça desatado que La Gazzetta acompaña con múmeros. Por ejemplo, los 121 goles marcados entre Messi, Neymar y Luis Suárez en 2015. Ninguna plantilla completa en Europa, exceptuando al Bayern (123), ha hecho lo que una delantera que empieza a ser leyenda. Suárez ha hecho 10 goles en los últimos seis partidos para un total de 41 goles en 59 partidos.
La Gazzetta ya especula con la posibilidad de que el Barça repita la gesta de 2010, cuando copó los finalistas del Balón de Oro con Messi, Iniesta y Xavi. Esta vez los elegidos serían el argentino, Neymar y Suárez. El partido del Bernabéu pudo resultar decisivo pero las votaciones se cerraron el día 20 de noviembre por lo que el 0-4 no tendrá consecuencias. Su efecto, eso sí, podría haber resultado devastador en las votaciones de los especialistas.
Y algo más. Ricci, en su informe, pone el foco en Luis Enrique. De puntillas, el asturiano lleva ya mejores números que Guardiola. Su balance (65-7-9) supera el de Pep (56-17-8). También en goles marcados (224 a 202) y en menos goles recibidos (62-65). Eso sí, Guardiola a estas alturas no había perdonado ningún título y al Barça de Luis Enrique le persigue el 4-0 de Bilbao en la ida de la Supercopa de España que le dejó sin título. Su próximo destino es Japón, el Mundial de Clubes. Luis Enrique, destaca La Gazzetta, ha incorporado al tiqui-taca un contragolpe descomunal. Eso, sin perder el modelo de control y posesión: 656 pases de media en cada partido con una precisión del 88,6 por ciento. En este minuto, La Gazzetta, como el resto de Europa, ve en el Barça el espejo.