Success: “Pido perdón por mi actitud y comportamiento”
El delantero nigeriano, que sigue apartado por Sandoval, envió un comunicado mostrando arrepentimiento y pidiendo perdón a sus compañeros, el cuerpo técnico y la directiva.
La semana empezó como estaba previsto: Success está castigado. El delantero saltó a los campos dela Ciudad Deportivay se ejercitó en solitario durante unos 45 minutos. Pero antes de abandonar las instalaciones, tal y como había previsto el club, pidió perdón a sus compañeros, el cuerpo técnico y la directiva “por el perjuicio que les haya podido acarrear con mi comportamiento”, disculpas que también pidió al presidente Quique Pina, Juan Carlos Cordero y José Ramón Sandoval “con quienes mantuve una discusión en la que no estuve a la altura del respeto que se merecen las personas que tanto me han ayudado desde mi llegada al club y me han acogido y tratado como si fuese mi familia. Pido perdón por mi actitud y comportamiento”. Success añadió en la nota que el problema que originó el desencuentro es “puramente deportivo” y que ha sido “malentendido por ambas partes”.
La reacción de Success forma parte del plan que ha trazado el Granada para que las aguas vuelvan a su cauce. Sandoval ya había cumplido con su parte: le esperó nada más llegar para poner las cartas sobre la mesa, para reprocharle la actitud y hacerle reaccionar, todavía molesto por la negativa del futbolista a viajar a Vallecas el pasado viernes. El entrenador se siente profundamente decepcionado por lo sucedido, y más con Success, por quien ha apostado decididamente desde el primer momento y sin duda ha contribuido a su explosión como jugador. Después habló con Success el médico Antonio Fernández, quien le preguntó de nuevo por el estado de la contractura que sufrió la pasada semana y por la que el futbolista se negó a viajar al sentir todavía molestias de las que ya parece recuperado.
Acabadas las conversaciones, el joven delantero empezó el trabajo en solitario. Estuvo realizando estiramientos, carrera continua y series de velocidad junto a José Alfonso Morcillo, el preparador físico, que no le abandonó en ningún momento. Pasados tres cuartos de hora, Success se marchó al vestuario como llegó: sólo y sereno, con aparente normalidad. En la balconada del edificio le aguardaron dos amigos que se mantuvieron cerca de él durante toda la tarde con quienes llegó ala Ciudad Deportiva.Luego, llegó el comunicado con el arrepentimiento público.