Un Depor al alza quiere maniatar el efecto Rubi
Granotas y gallegos, muy separados en la clasificación (18:15, C+ Liga). El Depor llega con algunas bajas, pero con material como para que no se noten las ausencias.
Levante y Deportivo son casi almas gemelas. Tanto en estatus, como en su modelo de vida, como en su objetivo e incluso ahora con Rubi en su manera de entender el fútbol (sigue el encuentro en directo en as.com). Con Alcaraz, ni punto de comparación. El técnico catalán demostró en Mestalla que viene con una idea prácticamente contraria a su antecesor. Semejante a la de su colega, hoy enemigo. A Víctor le gusta la pelota, ir al ataque. Fútbol vistoso y descarado, básicamente. Porque al fútbol se puede jugar de muchas maneras. Todas válidas. Sólo que unas más agraciadas de ver que otras.
Los gallegos han dejado claro en el primer tramo del campeonato que si no se tuerce la cosa no deberían pasarlo demasiado mal a final de curso. El Levante, eso sí, todo lo contrario. Su temporada empezó viciada y ahora a Rubi le toca arreglarlo. Por lo pronto recuperó a la vieja guardia y seguirá apostando por ella. A diferencia del derbi podría incluir a Feddal. Quizá también a Casadesús o Deyverson. El resto, muy parecido al equipo que plantó cara al Valencia.
El Depor llega con algunas bajas, pero con suficiente material como para que no se noten las ausencias. Jonathan fue la última y se quedó en casa a última hora. Arribas tendrá que suplir a Lopo en la zaga. Y la duda es saber quién ocupará las bandas blanquiazules, muy dadas a las rotaciones. Cani podría ser la gran novedad. Y falta ver si Fede llega a tiempo o finalmente Jonás sigue su progresión con su segundo partido consecutivo. Raro sería que Oriol acompañara al enrachado Lucas en ataque jugando fuera. Pero Víctor sabe que el Levante está herido y no quiere que sea hoy su resurrección.
Rubi se reúne con las Penyas para pedirles su apoyo
El entrenador granota quiso reunirse ayer con varios miembros de la Delegación de Penyas levantinistas para pedirles su apoyo y así caminar juntos de la mano en busca del objetivo común: la permanencia en Primera División. Un gran gesto de Rubi para aunar fuerzas de cara a lo que se antoja será un camino arduo y complicado. Y la afición, por supuesto, dicho y hecho. Para esta tarde ya ha preparado una animación especial con el fin de llevar al equipo en volandas hacia su segunda victoria del campeonato. Se repartirán unas 8.000 banderines y 50 banderas grandes para dar colorido a la grada, además de hacer un llamamiento para que cada aficionado contribuya con camisetas, bufandas, banderas, pancartas o cualquier complemento que sirva para alentar al equipo. La Delegación, tras la marcha a Mestalla el pasado fin de semana, quiere continuar con sus propuestas para estar al lado del equipo.