Brasil gana sin brillo y Neymar sólo juega ocho minutos

Brasil ganó sin brillo y sin necesidad de hacer uso de Neymar más que en los últimos minutos a una floja Costa Rica, alejada de la firmeza defensiva que sin Keylor Navas parece haber desaparecido, tanto en la última Copa Oro como en este primer amistoso posterior. El conjunto tico sufrió errores defensivos que ante un equipo como el brasileño suponen una losa.

El del gol de Hulk, nada más comenzar, fue un regalo impropio de una defensa que en el último Mundial dejó una sensación espléndida. El central del Palermo Giancarlo González se confío ante la presión, en vez de despejar, y el potente delantero brasileño sólo tuvo que arrebatarle la pelota y batir a Pemberton, sustituto de Keylor Navas.

Es curioso lo de Hulk, muy poco utilizado como delantero centro estos últimos tiempos de debate interno en Brasil cuando tiene condiciones como para jugar ahí y ser importante. No estuvo en la Copa América y Dunga pareció reconocer su error al situarle en esa demarcación ante la débil defensa costarricense, que por momentos fue un juguete en manos del jugador del Zenit.

La suplencia de Neymar dejó la inspiración única y exclusivamente en botas de Douglas Costa. El nuevo jugador del Bayern está con el turbo puesto en este arranque de temporada y suyas fueron de nuevo las cabalgadas más peligrosas. También de Fernandinho, que pudo marcar el segundo con una aparición desde atrás muy de su estilo.

A Costa Rica sus dudas defensivos le pesaban demasiado, incluso teniendo dientes en ataque como para hacer daño a Brasil. Bryan Ruiz reclamó un penalti en los mejores momentos de los ticos, justo antes del descanso, aunque la opción más destacable fue un gol mal anulado al propio Ruiz por un fuera de juego inexistente.

El partido entró en una zona de toboganes, lo que aumentó las llegadas de unos y otros y elevó el riesgo de quien menos pegada tiene, Costa Rica. Dunga varió su ataque con jugadores de refresco y esperó un segundo tanto con el que zanjar el partido. Douglas Costa estuvo cerca de conseguirlo con un lanzamiento que se fue alto, así como en un gol mal anulado por fuera de juego que no era. Las subidas por la izquierda de Marcelo fueron lo mejor de Brasil en ese tramo y el lateral madridista acarició el gol en una acción muy parecida a aquella con la que sentenció al Galatasaray en el Trofeo Bernabeú.

En los últimos minutos llegó el regreso de Neymar a la selección, después del incidente y posterior sanción en la Copa América que le hizo dejar el torneo a la mitad. Aún le quedan dos partidos de sanción que cumplir en partidos oficiales, pero Dunga le quiere en amistosos y con el grupo mientras tanto. También entró Rafinha, en su debut como internacional absoluto. No fue el día más brillante de Brasil pero al menos recuperó el sabor de la victoria, el mismo que se dejó en Chile en una Copa América de la que todavía no parece del todo recuperado.