Negredo: “Me sentía en deuda con todo el valencianismo”
Álvaro Negredo vuelve a sonreír. Remató con su golazo ante el Mónaco el costoso trabajo del curso pasado para que Mestalla vuelva a disfrutar de Champions.
¿Cuánto necesitaba una noche y un gol así?
—El delantero vive del gol. La temporada pasada no tenía esa suerte. Me intentaba quedar con el trabajo y otras cosas. Pero se necesita. Alcácer nos metió con su gol de Almería y esta vez me tocó a mí, pero lo importante es que todos contribuyamos.
—No es su primer gol así...
—De ese estilo he marcado unos cuantos. Me acuerdo, precisamente, uno al Valencia, a César. Fue parecido. En éste quizá tenía menos ángulo pero salió genial. Había opción de golpeo fuerte, pero elegí esa porque el portero suele tener menos reacción.
—¿Para noches como ésta fichó Negredo por el Valencia?
—Como éstas, como las de Vallecas o como cualquiera. Hay que jugar en todo tipo de campos y competiciones. Tuve la suerte de marcar el gol, pero hay que resaltar el trabajo que han hecho todos los compañeros en casa y en Mónaco y también lo hecho la temporada pasada, donde se gestó todo. Nos merecemos estar aquí.
—¿Viene un nuevo Negredo?
—Bueno, realmente nunca me fui. El año pasado no fue el mejor para mí ni en juego ni en goles. Para mí fue la peor temporada de mi carrera como profesional. Trabajé en verano para llegar lo mejor posible y ponerle difícil al míster las cosas. Me puso en Vallecas y también en Mónaco y lo que se busca es recompensarlo.
—¿Vuelve a ser feliz?
—Siempre lo he sido. Hay momentos de bajón quizá, pero desde que llegué he sido feliz. Tengo a los míos y a mi gente y con eso es suficiente. Pero si además le sumas que en el trabajo te va bien y está siendo recompensando pues mejor.
—¿Se sentía un poco en deuda con el valencianismo?
—Con el valencianismo y conmigo mismo. Soy muy autocrítico y sé cuándo hago las cosas bien y cuándo no. Es verdad que ellos no han dejado nunca de apoyarme y darme muestras de cariño. Y es cierto que necesito recompensárselo a ellos.
—Con lo mal que empezó el verano, que sonaba para salir.
—Empezó mal en cierto modo. Terminó la temporada pasada e hice autocrítica y me fui a desconectar. De vacaciones, con la familia. Vuelves con las pilas cargadas y dispuesto a no dar opción al míster a que te vea mal.
—¿Es importante la autocrítica importante para cambiar?
—En ningún momento yo he echado culpas a nadie de lo que pasó. Puedo jugar más o menos, pero el tema es que cuando me pongan lo haga bien. No lo estaba
—El abrazo con Alcácer deja claro el idilio que hay entre ustedes. El joven aprende del veterano, pero también el veterano del joven, ¿no?
—Es un jugador muy importante para nosotros. Hoy me ha tocado a mí. Siempre estamos dándonos muestras de cariño. Me toca ser el veterano, pero también se aprende de los jóvenes que te transmiten unas ganas tremendas.