Martínez Losa: “La salida de Ignacio Quereda debe ser real”

—¿Cómo ha vivido el desenlace de España en su primer Mundial?

—Lo he vivido con tristeza porque he estado allí y ha sido un evento increíble y se ha visto una evolución muy grande en muchos países. En el caso de España he visto a una selección que estaba triste, le faltaba confianza y creer. Ha habido otros casos como Noruega, Inglaterra, e incluso selecciones como Colombia y Costa Rica, que jugaban con alegría, compitiendo, que han dado su máximo y eso es al final lo que se pide, que las jugadoras transmitan y todos nos sintamos orgullosos de nuestra Selección.

—Las jugadoras apuntan al seleccionador como el culpable de esa falta de ilusión. ¿Hasta qué punto un entrenador es responsable de eso?

—No quiero apuntar a ningún sitio, pero creo que en España hace falta ilusión en el fútbol femenino y que las jugadoras tengan salidas y un modo de vivir, que en otros países sí se lo proporcionan y que en nuestro país hasta ahora no se lo estamos dando. Eso involucra a todos, no solo a la Federación, en un proyecto más global donde todo el mundo se sienta partícipe. El reflejo ha sido el Mundial. Es inevitable comparar con Inglaterra.

—En 2013, en la Eurocopa de Suecia, España ganó a Inglaterra en la fase de grupos y ésta quedó eliminada. En este Mundial es Inglaterra la que está en semifinales. ¿Qué ha pasado?

—En Inglaterra se dieron cuenta de que el fútbol femenino debía tomar otro camino. La selección la tuvieron en manos de Hope Powell durante tiempo (15 años) y al final no fue positivo. La Federación Inglesa se dio cuenta de que tenía que hacer un cambio en el banquillo. Hizo un proceso de selección y al final eligió a Mark Sampson (32 años) y creó un proyecto sólido para el fútbol femenino inglés.

—¿La preparación del Mundial ha sido otra de las claves?

—La Federación Inglesa no escatimó a la hora de ofrecer a las chicas los mejores medios. Jugaron amistosos contra Estados Unidos, contra Alemania en Wembley ante 50.000 personas. Se fueron con bastante antelación a Canadá. Allí jugaron un amistoso, han buscado los rivales más competitivos y al final el resultado está ahí. Se creó una mentalidad ganadora.

—Las jugadoras han pedido la marcha de Quereda. ¿Cree que es la solución?

—Hace falta un cambio profundo. Yo he estado en el Canadá y he visto cómo se mueven los seleccionadores y el fútbol internacional y no sé hasta qué punto hemos estado preparados en los últimos tiempos. La Federación debe dar un paso al frente porque al final las jugadoras se sacrifican un montón. Si ellas piden en ese cambio que salga Ignacio Quereda, debe ser real. No sé hasta qué punto, si Ignacio Quereda se queda en otro cargo en la Federación, ese cambio será real.

—¿Le gustaría ser seleccionador de España?

—Me gustaría ayudar a cambiar las cosas en el fútbol femenino en España y, por supuesto, ser seleccionador nacional de mi país en algún momento de mi carrera. Sería un honor, pero actualmente me debo al Arsenal y no soy yo quien decide al técnico.