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CHELSEA-CRYSTAL PALACE

El Chelsea gana la quinta Liga inglesa de su historia

Un solitario tanto de Hazard supuso el triunfo de los de Jose Mourinho, que a falta de tres jornadas para el final del campeonato se proclama campeón de la Premier.

Eden Hazard
Eden HazardGERRY PENNYEFE
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El Chelsea se proclamó campeón de la Premier League por quinta vez en sus 110 años de historia (tercera con José Mourinho como entrenador y cuarta en era Abramovich) tras ganar 1-0 al Crystal Palace en un partido donde destacó más la fiesta de la grada que lo que ocurrió en el césped.

El equipo de José Mourinho necesitaba sumar tres puntos para ser campeón y eso es exactamente lo que hizo. Las florituras quedarán para la celebración. No hizo nada más ni mejor que su rival pero se bastó de un solitario gol de Hazard antes del descanso para llevarse el partido y el título a falta de tres jornadas para el cierre del campeonato. Así completa una temporada en la que también ha logrado la Copa de la Liga y pone fin a cuatro años de hegemonía de los equipos de Manchester (dos victorias para el United y otras dos para los Citizens) para conquistar un título que se le resistía desde la temporada 2009-2010, con Carlo Ancelotti como entrenador.

El Palace salió al partido decidido a retrasar la fiesta de sus vecinos de Londres y por momentos pareció cerca de conseguirlo. Tuteó a los blues durante los primeros 40 minutos y apenas vio peligrar el 0-0 inicial en una ocasión de Hazard al minuto 13. Pero justo antes del descanso, cuando el 0-0 hacía justicia a lo que pasaba en el campo, el árbitro Kevin Friend señaló penalti a favor de los de Mourinho tras un leve forcejeo en el área entre McArthur y el futbolista belga. Riguroso. Y, aunque el recientemente elegido mejor jugador del campeonato falló el lanzamiento desde los 11 metros, aprovechó el rechazo del meta Speroni para cabecear a la red el 1-0.

Mourinho cerró las compuertas en el descanso con la entrada de Mikel por Cuadrado. El mensaje era claro. Si el 1-0 le valía para ser campeón para que marcar un segundo gol. Y así se encerró atrás para tapar las buenas intenciones del Palace en ataque y aprovechar la velocidad de Hazard y Willian al contragolpe para matar el partido. Cualquiera pudo marcar pero para alegría de la afición de Stamford Brdige ninguno lo hizo y el Chelsea volvió a convertirse en el mejor equipo de Inglaterra cinco temporadas después.