España - Ucrania
Álvaro Morata, un 'nueve' llamado a reanimar a España
La vieja guardia de Vicente del Bosque acompañará al delantero de la Juve esta noche (20:45 TVE1) ante Ucrania. Nadie en España ha marcado más de 11 goles esta temporada.
Anocheció en el Mundial y España aún no ha visto amanecer. Tres derrotas (ante Francia, Eslovaquia y Alemania) desde entonces, una segunda plaza inesperada que hay que defender hoy en un grupo muy poco montañoso y la amenaza de que la afición de Sevilla, una gloria nacional, deje calvas en el Sánchez Pizjuán, estadio donde, por cierto, la Roja nunca ha perdido. Un aire de depresión acoge este España-Ucrania, donde hay más rival de lo que parece.
Desde que Mykhaylo Fomenko, un exfutbolista del Dinamo de Kiev de los setenta, ya dirigido por Valery Lobanovsky, tomó el equipo (finales de 2012) sólo ha perdido dos partidos de veinte. Uno, ante Francia, le costó quedarse fuera del Mundial. Otro, ante Eslovaquia, le mantiene con España en el grupo perseguidor. Buenos números para un país que conoció, en lo deportivo y en lo social, tiempos mejores. Ayer mismo, Fomenko advirtió que algunos de sus futbolistas pueden ser llamados a filas en el conflicto con los rebeldes prorrusos. “Todo es posible en Ucrania”, se lamentó ante los periodistas. Fomenko fue el último recurso para darle la vuelta a una selección que se había ido en la primera ronda de la Eurocopa de 2012. Le llamaron a él porque Harry Redknapp y Sven Göran Eriksson dijeron no. Y anda construyendo un equipo con futbolistas del Dinamo, el Dnipro y el Shakhtar. Sólo hay dos extranjeros en el grupo, uno de ellos el veteranísimo Tymoshchuk, que hizo fortuna en el Bayern y hoy apura su carrera en el Zenit ruso. Yarmolenko es su futbolista más acreditado, pero vive de la armonía, dureza y compromiso del bloque.
A eso se enfrenta España, en la que el valor de mercado de sus futbolistas (611 millones) es más de cinco veces superior al de los del rival (113). Por ahí, por el lado de la historia (dos victorias y un empate) y por el de las apuestas (se paga el triunfo de La Roja a 1,28 y el de Ucrania a 11) el partido está de su lado, pero tiene miga.
Ucrania sólo ha encajado un tanto, el 0-1 ante Eslovaquia, en la fase de clasificación y en España la falta de rematadores, con Villa y Fernando Torres en retirada, es mal endémico. Morata y Silva han marcado, entre todas las competiciones, once por cabeza en lo que va de temporada. El resto anda por debajo. Algunos, como Cesc (4) o Iniesta (3), escandalosamente. Cabe, pues, pensar que el delantero de la Juventus será el filo de la navaja nacional y quizá el único de los titulares que no estuvo en el Mundial, porque pese a que Del Bosque ha ocultado cuidadosamente la alineación en los ensayos, todo indica que para un compromiso determinante tirará de su guardia.
La media de edad de sus convocados anda por los 26 años, pero sube mucho entre los imprescindibles. Casillas, Juanfran, Piqué, Ramos y Jordi Alba protegerán el equipo y de ahí en adelante caben todas las opciones. Busquets, siempre intocable, sale de una lesión, aunque apunta a titular con Koke como pareja. También se da por seguro a Iniesta y Cazorla, Isco, Silva y Pedro optan a los dos plazas libres. Vitolo y Juanmi, los reclutas, deberán esperar al amistoso de Holanda para ganarse el debut. Allí hay más enemigo pero menos riesgo.