TENERIFE 1 - LEGANÉS 0
El Tenerife prolonga su reacción ante el Leganés
Un solitario gol de Maxi Pérez permitió a los de Raúl Agné sumar los tres puntos frente a un conjunto 'pepinero' que estuvo cerca de no irse de vacío de la capital tinerfeña.
El CD Tenerifé logró prolongar su reacción tras la llegada de Raúl Agné al banquillo, con un sacrificado triunfo ante un metódico Leganés que estuvo bastante cerca de no irse de vacío de la capital tinerfeña.
El dinámico y entusiasta juego practicado por ambos equipos desde los instantes iniciales adoleció de esa misma agilidad en los metros finales, precisamente en el momento en el que las respectivas delanteras se topaban con unas afianzadas retaguardias que imponían una y otra vez su mayor contundencia física.
Esta solvencia defensiva propició que los porteros únicamente interviniesen en una única ocasión en la primera media hora de juego, inicialmente fue Dani el que atajó un flojo disparo de Chuli, y poco después fue Serantes el que también detuvo un tiro de Suso.
Pero esta falta de convicción o de eficacia en ataque poco a poco fue mermando esa fogosidad inicial en el juego hasta casi concluir la primera parte, pero cuando el encuentro encaraba ya esta recta final emergió la figura de Maxi para desnivelar el marcador.
Un pase en profundidad de Juan Carlos Real permitió al delantero uruguayo hacerse con un balón dentro del área, encarar la puerta ligeramente escorado a la izquierda, sortear la salida del meta y marcar con su pierna izquierda a puerta vacía.
Tras la reanudación el conjunto insular se situó mejor y más circunspecto que su rival, preocupado sobre todo en mover el balón más que en asediar a un rival madrileño que se veía incapaz de sobreponerse a este hegemonía local.
Pero esta supremacía tinerfeña sólo duró hasta el minuto setenta, en el que la misma pasó ahora a la hueste madrileña, con un primer serio aviso de Chuli, pero su remate, a un escaso par de metros de la línea de gol, lo rechazó el meta Dani con apuros.
Poco después fue el poste derecha del meta hispano venezolano el que repelió un disparo de Velasco, mientras que en el setenta y cinco, Dani, de nuevo, tuvo que emplearse ante un envenenado disparo de Sergio Prendes, y en el ochenta y dos también respondió con solvencia ante un franco cabezazo de Morán.
Con esta última ocasión fallada por el cuadro madrileño concluyó un sufrido encuentro que deja al Tenerife mucho más cerca de la zona tranquila de la tabla que la del descenso.