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SCHALKE 3 - HOFFENHEIM 1

El Schalke respira antes de visitar el Santiago Bernabéu

El Schalke le puso punto y final a una racha negativa de cuatro encuentros sin conocer la victoria y se impuso en casa al Hoffenheim por 3-1. El triunfo fue una bocanada de oxígeno.

Los jugadores del Schalke celebran el 2-0.
Los jugadores del Schalke celebran el 2-0.AFP

A falta de tres días para disputar una complicada vuelta de los octavos de Champions en el Bernabéu (martes, 20:45h.), tras la derrota 0-2 en el Veltins, el Schalke le puso punto y final a una racha negativa de cuatro encuentros sin conocer la victoria y se impuso en casa al Hoffenheim por 3-1. El triunfo fue una bocanada de oxígeno para los de Di Matteo, no sólo debido a la dolorosísima derrota por 0-3 en el derbi del Ruhr frente al Dortmund la semana pasada, sino porque ayer había un objetivo y se consiguió: mantenerse en puestos europeos frente a un rival directo como el Hoffenheim.

En contra de lo que el Schalke hizo en jornadas anteriores, el conjunto minero empezó el partido con un claro espíritu ofensivo, buscando la portería de Baumann y no tardó en encontrarla. Apenas habían transcurrido 12 minutos cuando Fuchs enganchó un centro de Höger con la izquierda y adelantó a los suyos en el marcador con una volea rasa ajustada al palo izquierdo.

El Schalke, con tres cambios en el once inicial con respecto a la derrota en Dortmund, bajó la intensidad, pero sin perder el control del choque. Así, a falta de un cuarto de hora para el descanso, volvió a pisar el acelerador y anotó el segundo. Choupo-Moting controló un centro de Höger y se lo puso en bandeja a Meyer, que sólo tuvo que ajustarlo al palo izquierdo.

Los mismos jugadores fueron los protagonistas en el tercer tanto minero. Ocho minutos después de la reanudación, Choupo-Moting luchó un balón y asistió a Meyer, que dio la estocada final al Hoffenheim. Con los tres puntos en el bolsillo, los de Di Matteo empezaron a pensar en el partido del martes ante el Madrid, se relajaron demasiado y se vieron superados por una contra de Volland que puso el 3-1 final. Y ahí acabó todo.

Orgulloso. Di Matteo elogió el partido de los suyos: “El equipo, como colectivo, ha estado genial. Cada uno hizo su trabajo a la perfección. Estoy orgulloso de ellos. Vamos a disfrutar de este resultado durante unas horas porque hay que centrarse en la Champions; el martes tenemos un encuentro complicado en Madrid”.