Betis - Girona
Un virus de vestuario, lo que le faltaba ya al Betis de Pepe Mel
El Benito Villamarín medirá hoy (20:00 C+1) la capacidad de reacción de un Betis que no ganó en sus últimos tres compromisos y que se ha visto envuelto en la polémica.
El Benito Villamarín medirá hoy la capacidad de reacción de un Betis que no ganó en sus últimos tres compromisos y que se ha visto envuelto en la polémica de un posible amaño de encuentros. El nombre de Jordi Figueras centra las miradas mientras el equipo trata de reinventarse para no ceder más terreno respecto a los candidatos al ascenso. Uno de ellos será su rival hoy: un Girona que sorprendió a muchos con un juego atrevido y vertical que lo ha convertido en el mejor conjunto a domicilio.
En una semana repleta de problemas internos, surgió otro de última hora: un virus estomacal que afecta al vestuario y que mantiene en vilo a Mel respecto al once. Bruno no estará por sanción y Rodas debutará con casi total seguridad desde el inicio, mientras Mel ya deja claro que Jordi, a pesar de todo, será titular.
N’Diaye apunta a volver al once tras su sanción y las bandas estarían en manos de Dani Ceballos y de otro que iba a ser Portillo, pero el malagueño es de los más afectados por el virus. Arriba, si no pasa nada, estarán Rubén Castro y Molina de nuevo.
El Girona quiere jugar sus cartas. Se presenta ante el gran candidato a todo como el visitante más peligroso. Con poco que perder, Machín dará ritmo al juego de los suyos para que Sandaza y Felipe Sanchón entren en juego y hagan daño a los locales. Su solidez y el nerviosismo local, bazas.
No hay finales anticipadas. Pero este Betis necesita un golpe de moral añadido después del primer resbalón de Mel desde su llegada. No perdió hasta el momento. Pero ganar se ha convertido en una obligación y la altura de la cita confirma las necesidades.
Bien contra los de arriba
Victoria en Girona (1-3) en la primera vuelta, también en El Molinón con Pepe Mel ya en el banquillo y empates, aunque grisáceos en cuanto al juego, ante el Valladolid y Las Palmas, a los que volverá a enfrentarse en breve. Es el aceptable bagaje del Betis contra los equipos de arriba, algo que hace despertar optimismo en Heliópolis.