Urge una reacción en Orriols ante unos leones crecidos

Primera de las 18 finales que tienen por delante Levante y Athletic en su pelea por una nueva permanencia en Primera División. Sin estar previsto, los leones cohabitan todo el campeonato en la zona medio-baja de la tabla, coqueteando con la zona de peligro en la que anda estancado permanentemente un Levante para el que hoy empieza su particular ‘ahora o nunca’. Con el frenético cierre del mercado de fichajes en Orriols, Lucas ya sabe lo que tiene y con eso (a falta de la confirmación del alta de Bryan Ruiz, que todo apunta a que no habrá ningún problema) se tiene que salvar de la quema.

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Por lo pronto ya ha dejado claro que necesitaba los refuerzos como el comer. Los dos últimos, recién llegados y con solo un entrenamiento a sus espaldas, ya han entrado en la convocatoria. Incluso todo apunta a que Iván Ramis será titular en el centro de una zaga muy mermada por las bajas y con gente fuera de su posición natural. La gran duda de Lucas está en forzar la máquina con Diop o darle un respiro tras regresar de la Copa de África. Parece que jugará, la cosa no está para concesiones. Dos meses sin ganar es mucho.

Con el ánimo bien distinto llega el Athletic, flamante semifinalista de la Copa del Rey (cotas que hace bastante tiempo no alcanzaba), pero con el peligro que eso conlleva. Cualquier despiste en este tramo de la Liga puede resultar mortal de necesidad y el descenso está a tiro de piedra. Eso sí, la amenaza perenne de Aritz Aduriz sigue revoloteando por un Ciutat de València que siempre le recibe con máximo respeto sabiendo de sus fechorías en este campo.

Llegar y besar el santo

La necesidad aprieta y Alcaraz no quiere perder más tiempo. Kalu Uche e Iván Ramis se estrenaron ayer ya en una convocatoria en el día que se ponían por primera vez a sus órdenes y conocían a sus nuevos compañeros. Ya pasó la semana pasada con José Mari, que repite también. Y mientras, esperando la respuesta por Bryan Ruiz.