COPA DE ÁFRICA

Thievy marca y se lesiona en la clasificación de Congo

Hizo el 1-0 ante una subcampeona Burkina Faso que adoleció de pegada y quedó fuera. Bancé empató, pero Nguessi sentenció en el 87'.

Thievy pelea con Yago en un lance del Congo-Burkina Faso.
Aritz Gabilondo
Aritz Gabilondo (San Sebastián, 1980) es redactor jefe de fútbol internacional de AS. Licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra, empezó su carrera en El País y desde 2002 trabaja en AS. Ha cubierto Mundiales, Eurocopas y Juegos Olímpicos para este diario. Es comentarista de fútbol internacional en Cadena Ser, Movistar+ y Mediaset.
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Congo certificó su clasificación para los cuartos de la Copa de África subido de nuevo a lomos de un gran Thievy, que fue protagonista por marcar el primer gol del partido y por marcharse poco después lesionado. No parece demasiado grave, pero cualquier mínima lesión podría hacerle perderse el cruce de cuartos del próximo sábado. 

El delantero del Almería volvió a resultar fundamental. Jugando como único punta de los congoleños se movió con soltura y puso en jaque a Burkina Faso, subcampeona en la última edición y una de las principales decepciones en esta. Ni Pitroipa ni Alain Traoré, sus mejores jugadores, pudieron evitar una sonrojante eliminación a las primeras de cambio. 

De hecho eran los burkineses los que necesitaban ganar para pasar de ronda, pero lejos de ser incisivos y verticales en ataque volvieron a adolecer de pegada y dejaron una sensación paupérrima. Todo lo contrario que el Congo. La experiencia en el banquillo de Claude le Roy ha hecho que esta selección regrese a la élite africana 15 años después y el trabajo ha tenido continuidad con una fase de grupos exquisita: siete puntos de nueve posibles y clasificada como líder para cuartos. 

Fundamental para ello resultó nuevamente el doble pivote N’Dinga-Oniangue, poderosísimo como en todo el campeonato, la libertad por la derecha de Fode y la electricidad con y sin balón de Thievy. Fue él, poco después del descanso, quien empujó a la red un buen envío desde la derecha de Fode y obligó a Burkina Faso a casi un imposible: marcar dos goles cuando en toda la CAN no había hecho ninguno. 

No hubo manera. A Bertrand Traoré se le anuló el empate en una jugada a balón parado por fuera de juego previo y casi al final, ya sin tiempo, empató Bancé para mantenerla esperanza. Pero el destino esta vez tenía reservado un hueco a Le Roy y Congo. Así, en un error del portero Sanou en el 87’, Nguessi marcó el 2-1 con el que cerrar una noche histórica para unos y triste para los otros. Es lo que tiene el fútbol. Es lo que tiene África.

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