VALLADOLID 2 - ALAVÉS 0
El Valladolid mantiene su buena racha y entra en ascenso directo
Los goles de Alvaro Rubio y Mojica permitieron al conjunto vallisoletano vencer al Alavés y sumar su tercera victoria consecutiva.
El Valladolid vuelve a puestos de ascenso directo después de sumar su tercera victoria consecutiva (2-0) ante un inoperante Alavés que tuvo pocas opciones de sacar algo positivo en el partido. Con un gol en cada parte, los jugadores de Rubi firman un parcial de 11-0 en los últimos tres partidos y dan por zanjado el bache de los dos últimos meses del año 2014. No fue, sin embargo, un partido brillante como ante el Barcelona B o lleno de oficio como en Zaragoza. Ayer el Valladolid no jugó bien, por momentos, en la segunda parte sufrió más de la cuenta, incluso el Alavés pudo empatar con un cabezazo de Juli al larguero, pero Rubi reaccionó, volvió al trivote y los pucelanos estuvieron más certeros, más seguros y sentenciaron el partido.
De salida, el técnico del Valladolid cambió el 4-3-3 que tan bien le ha ido en los últimos partidos por el 4-2-3-1 con el debutante Pereira en la derecha y Jeffren en punta. El Alavés, con líneas muy juntas, trataba de dificultar la circulación del balón por dentro de los locales, por lo que los pucelanos tenían que encontrar la vía de agua por las bandas. Dicho y hecho. Mojica se fue del lateral derecho, Galán, se internó en el área y dio un pase atrás que convirtió en gol Rubio. El riojano llevaba varios partidos rondando el gol y, por fin, lo consiguió. Alma y corazón de este Valladolid, cuando Álvaro está bien, su equipo está bien. Con 1-0, el equipo de Alberto, que volvía a Zorrilla, donde jugó de portero, no varió demasiado el plan buscando una oportunidad que solo llegaría en las botas de Toribio antes del descanso. Antes Jeffren y Mojica se quedaron solos antes Manu, pero el portero se impuso en ambas ocasiones a los atacantes blanquivioletas en el mano a mano.
En la segunda parte, el Valladolid salió un poco dormido y el Alavés a base de enturbiar el partido, de ir mucho al cuerpo a cuerpo, fue capaz de meter en su área a los pucelanos. Sin mucho peligro, pero rondando la portería. En esos minutos fue cuando Juli cabeceó al larguero una falta lateral. El Valladolid no conseguía mandar en el partido y el resultado parecía abierto. Sin embargo, Rubi dio entrada a Sastre, el equipo volvió al trivote en el centro del campo y las opciones del Alavés se esfumaron. Con el mallorquín en el campo, el Valladolid volvió a tener el completo dominio del balón y, por tanto, del juego. Fue precisamente Sastre el que metió un perfecto balón interior a Óscar para que éste asistiera a Mojica y el colombiano marcara el tanto de la sentencia. Los locales ya se sentían ganadores y los vitorianos veían como se les escapaba la posibilidad de sumar ese triplete de ganar en casa de los tres recién descendidos. Ganaron en Sevilla y en Pamplona, pero no en Zorrilla, y se mantienen cuatro puntos por encima del descenso.