CARRUSEL DEPORTIVO
“Quiero hacer debutar en ‘Carrusel’ a Cerezo y Emery”
Raúl Pérez es el "humoristador" de Carrusel: imita más de 30 voces. Y eso que estudió Telecomunicaciones, pero en su vida se cruzaron Los Guiñoles y tomó el desvío a la risa.
-¿Humorista de cuna?
-¡Qué va! Yo estudié Telecomunicaciones. Y trabajé de eso varios años, pero un día alguien comentó en mi empresa que buscaban imitadores en Los Guiñoles y probé. Así empecé...
-Pero algo tendría que tener para que se lo dijeran, ¿no?
-No lo sé. Yo siempre he sido bastante tímido. La vena artística quizá me viene de mi padre, que siempre hacía el ganso en las cenas de empresa en Navidad (risas).
-¿Quién fue su primer personaje en ‘Los Guiñoles’?
-El ministro Acebes. Estuve seis años, hasta que se acabó, y llegué a imitar a 25 personajes. Iker Jiménez, Zapatero, Fernando Alonso, Ronaldinho...
-¿Cómo fichó por ‘Carrusel’?
-Tras Los Guiñoles estuve en Anda Ya y entraba con Gallego en SER Deportivos. Cuando él dio el paso me dijo: “Tienes que estar sí o sí”. Así que se juntaron dos factores: que justo yo había decidido, después de diez años, dejar de madrugar a las 04:30 y que Jesús confiara en mí.
-¿Algún favorito?
-A Pedrerol le tengo muy pillado. También a Florentino. Quizá estos dos. A Florentino, le vi un día en la tele, cuando aún era Teleco, y le pillé iso facto. A Pedrerol lo tenía de El Día Después. Y eso que ahora habla más rápido, es otro personaje.
-¿Cómo deciden quiénes y cuándo entran en ‘Carrusel’?
-A veces le escribo a Jesús en una pizarra: “¿Un Luis Enrique hablando de esto?”. El 90% surgen en el momento. Piensas el personaje y ajustas el chiste. O al revés. Carrusel es un programa que está muy vivo.
-¿Le gusta el deporte?
-Me pirra. Me trago todo. Hasta el curling.
-¿Prepara nuevas voces?
-Quiero hacer debutar en Carrusel a Cerezo y Emery...
-¿Le han dicho algo alguna vez sus ‘imitados’?
-Jordi Hurtado llamó un día a la radio para decir que le encantaba. Y Risto. Pedrerol también me dice que le encanta, aunque seamos un poco puñeteros...
-¿Y aún tímido?
-Ya no, pero eso ha derivado en seriedad. ¡Me dicen que soy bastante serio fuera del trabajo... (risas)!