Paco Alcácer y Rodrigo siguen con la fiesta en el Valencia
Los ché se adjudicaron el Trofeo Naranja ante el Milán con goles y el equipo dio muestras de fortaleza. Diego López encajó dos goles en su debut.
La vida en el Valencia, de repente, parece de color de rosa. O mejor dicho, naranja. El color de la equipación de ayer che y el nombre del trofeo que llevó a sus vitrinas tras vencer al nuevo Milán de Diego López. Y es que el anuncio de la llegada de Peter Lim al club ha traído una ola de optimismo e ilusión que ya ha contagiado a todo el valencianismo. Y si encima el equipo empieza a dar muestras de fortaleza, como ayer, Mestalla se convierte en una olla a presión detrás de su equipo.
Vale que es pretemporada y que Valencia y Milán llenaron el duelo de altibajos. Pero Nuno va camino de formar un bloque rocoso, lleno de automatismos, y con el sello de su técnico. Y si encima tiene arriba la calidad de Alcácer y Rodrigo, este Valencia está llamado a dar guerra a los de arriba en la Liga. Más aún teniendo en cuenta que este año sólo participará en dos competiciones.
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Robar y salir rápido. Es una de las premisas de Nuno. Así llegó el primero, aunque realmente ni siquiera hizo falta salir a la contra. Alcácer interceptó un pase de Muntari y levantó la vista. Allí vio adelantado a Diego López, que no tuvo un buen debut, y la coló desde 40 metros. Mucha calidad hay que tener para hacerlo tan fácil.
El Valencia siguió a lo suyo pero no contaba con Honda, que transformó con clase una falta directa que entró tras pegar en el palo de Alves. Pero lo que en otros tiempos habría noqueado al Valencia, ahora le espolea. Rodrigo enganchó un balón en el lateral del área, se fue de dos y soltó un latigazo que entró por el palo de Diego López. Rodrigo y Feghouli, en la segunda parte, pudieron aumentar la cuenta.
