LA INTRAHISTORIA
Cristiano tiene una espina clavada con el Estadio Da Luz
Hace diez años, el crack portugués perdió allí la final de la Eurocopa ante Grecia con un gol de Charisteas en el minuto 57 de partido.
Cristiano jamás olvidará el 4 de julio de 2004. Aquel día es el más triste de la carrera profesional del crack madridista. Portugal, con él en el once titular, perdió ante Grecia en el Estadio Da Luz la final de la Eurocopa. Un gol de Charisteas en el minuto 57 dejó a Cristiano y compañía sin la que sería la primera Eurocopa de la historia de Portugal.
Desde entonces, Cristiano tiene esa espina clavada. El próximo sábado, diez años después y en el mismo escenario de aquella fatídica fi nal, el delantero espera levantar la Décima y poder superar en parte aquella histórica afrenta. Tiene una cuenta pendiente con Da Luz y quiere saldarla ante el Atlético.
La imagen de Cristiano llorando desconsolado tras la derrota ante Grecia dio la vuelta al mundo. El entonces seleccionador de Portugal, Luis Felipe Scolari, fue el primero en acercarse al delantero, que por aquel entonces tenía 19 años: “Cristiano Ronaldo es un ganador, nunca me voy a olvidar de sus lágrimas al término del partido. Fui el primero en consolarlo”, declaró Scolari tras la fi nal. Seguramente, si el Madrid gana la Décima en Lisboa, Cristiano tampoco podrá controlar las lágrimas, pero en este caso serán de felicidad.
Precisamente, ayer se cumplieron seis años de la Copa de Europa que el crack portugués ganó con el Manchester United ante el Chelsea en Moscú. Él marcó el gol de los red devils, pero falló uno de los lanzamientos de la tanda de penaltis. Pese a ello, el United logró el título. El sábado, ante la mirada de toda su familia y amigos, Cristiano confía en lograr su segunda Champions.