Liverpool-City, el partido que decide más de media Premier

Veinticinco años después de la tragedia de Hillsborough, a las 14:37, justo a la hora en que se paró el partido contra el Nottingham Forest más un minuto de silencio, el Liverpool se presentará en Anfield con la intención de convertir su asalto a la liga inglesa en una realidad, en el mayor de los homenajes a las 96 víctimas de aquella tarde aciaga. El City está a cuatro puntos pero con dos partidos menos y se antoja obligada una victoria de los reds en casa para que la historia más romántica de la Premier se convierta en una realidad.

El Liverpool, que ha ganado los últimos nueve partidos de liga marcando 24 goles en ese periodo, lidera la clasificación por delante de clubes más ricos (el City paga una media de dos millones de euros más de sueldo a cada jugador). Nadie contaba con los de Rodgers, quien admite que su equipo está al menos un año por delante de sus expectativas iniciales. Pero Rodgers ha sido inteligente: cambió su idea original, cercana al tiqui-taca nuestro, para explotar la capacidad de pase largo de Gerrard, que cada vez juega más como Xabi Alonso a quien admira y copia, y la velocidad de la SSS, Sturridge, Suárez y Sterling.

El City, con la novedad de Agüero, llega obligado por presupuesto y calidad a Anfield donde sólo ha ganado una de sus últimas 16 visitas. En una temporada donde el Chelsea ha cojeado, donde el United no se encuentra y el Arsenal sigue intentando recordar cómo se gana, los de Pellegrini deberían haber mostrado su poderío mucho antes. Pero la falta de centrales, de personalidades fuertes en momentos clave y alguna ligereza táctica les ha dejado, de momento, por detrás del Liverpool y el Chelsea. Pero si gana todos sus partidos, obtendrá el título.