Hércules
Quique Hernández, el héroe del último triunfo en Las Palmas
La isla es casi tierra prohibida para el conjunto blanquiazul. Muy pocas alegrías se ha llevado el combinado alicantino cada vez que ha tenido enfrente la camiseta amarilla.
Cada vez que se sortea el calendario a principio de curso, el Hércules no quiere ni mirar cuándo le toca visitar a Las Palmas. La isla es casi tierra prohibida para el conjunto blanquiazul. Muy pocas alegrías se ha llevado el combinado alicantino cada vez que ha tenido enfrente la camiseta amarilla. De hecho, el Hércules no gana en casa de Las Palmas desde junio de 1993. La última victoria blanquiazul en tierras canarias se produjo con Quique Hernández en el banquillo. Aquel triunfo (0-2) fue especial porque confirmó el ascenso a Segunda tras una brillante liguilla. Desde entonces, el Hércules ha encadenado decepción tras decepción, hasta el punto de celebrar un empate como un título.
Quique tiene el honor de ser el último técnico blanquiazul que logró un triunfo en el feudo amarillo. Desde aquella hazaña, han pasado casi 21 años. El de Anna intentará repetir aquella noche mágica el próximo sábado, consciente de la necesidad que tiene su equipo de lavar la imagen que dio ante el Girona y dar un salto hacia su objetivo. El clima, el cambio horario o la lejanía son algunos de los argumentos que utilizan jugadores y técnicos para justificar sus malas actuaciones en Las Palmas. El antiguo Insular y el nuevo estadio de Gran Canaria han visto la peor versión del Hércules en infinidad de ocasiones.
El Hércules ha visitado a Las Palmas en 32 ocasiones, entre Liga y Copa. El conjunto blanquiazul sólo fue capaz de vencer en cuatro oportunidades. Perdió en 21 visitas y sólo empató en siete oportunidades. En Primera División, ganó en dos ocasiones, en Segunda sólo consiguió un triunfo (temporada 83-84) y en Segunda B tocó la gloria tras firmar el regreso a la división de plata (92-93).
En Copa, los precedentes también son negativos, ya que disputó tres partidos en la isla y perdió en las tres ocasiones. Quique ya venció a la maldición de Las Palmas hace más de dos décadas. Ahora, le toca repetirlo.