Borussia Dortmund - Real Madrid | El árbitro
Pitará el esloveno Skomina, rígido en el tema disciplinario
Como internacional ya lleva 166 partidos en los que ha mostrado 668 amarillas (4,02 de promedio) y 33 rojas (0,19), por lo que se le puede catalogar como un árbitro disciplinario.
El árbitro esloveno Damir Skomina (Koper, 5-8-1976) es un veterano en el arbitraje FIFA desde 2003. Aunque su historial no es deslumbrante, últimamente cuenta a sus 37 años con el apoyo de los organismos FIFA y UEFA y por ese motivo está preseleccionado para el cercano Mundial de Brasil.
Este agente inmobiliario y promotor turístico estuvo de cuarto árbitro en casi todos los partidos de la Eurocopa 2008 y ha pitado nueve encuentros de las eliminatorias mundialistas para Brasil, con un balance de 31 tarjetas amarillas y tres rojas. Como internacional ya lleva 166 partidos en los que ha mostrado 668 amarillas (4,02 de promedio) y 33 rojas (0,19), por lo que se le puede catalogar como un árbitro disciplinario y rígido.
Las crónicas que he podido ver sobre sus actuaciones dicen de él que es un árbitro bastante neutral, aunque en algunos partidos no se ha complicado la vida en las áreas. Además, tiene la costumbre de aplicar la ventaja casi siempre cuando los partidos ya están decididos.
Precedentes. Al Real Madrid le ha pitado en tres ocasiones y todas ellas acabaron con triunfos blancos. La primera vez en el Real Madrid-Ajax (2-0) del 15 de septiembre de 2010, luego el 3-0 al Olympique de Lyon del 16 de marzo de 2011 y la temporada pasada arbitró la épica remontada blanca (3-2) contra el Manchester City en el Bernabéu (18-9-2012). Tiene menos experiencia contra el Borussia, sólo un partido y también la campaña pasada, un cómodo 3-0 de los alemanes al Shakhtar el 5 de marzo de 2013. Mañana será su segundo partido en tierras alemanas.
En sus 23 partidos arbitrados en Champions ha señalado seis expulsiones, sólo una al equipo local y cinco al visitante. De hecho, en su último partido, el Viktoria Plzen-CSKA (2-1) del pasado 10 de diciembre echó a dos jugadores moscovitas. No acostumbra a pitar penaltis, sólo tres, pero todos ellos fueron a favor de los equipos locales.
En el aspecto personal, no tendrá problemas para entenderse con Ancelotti llegado al caso, porque habla perfectamente italiano. Tiene una buena colocación en el campo y su punto más débil es su indecisión ante los roces entre jugadores que siempre intenta solucionar con el diálogo.
Creo que el hecho de estar preseleccionado para Brasil le afectará positivamente para dirigir al Real Madrid en Dortmund, dado que hay muchos jugadores que se encontrarán con él en el Mundial. Este es un árbitro de los clásicos que piensan antes de pitar, y eso le favorece también al equipo blanco. Suerte, Skomina.