Ellas también quieren ser unas grandes campeonas del Mundo

La Sub-17 femenina también quiere subirse al carro del viento a favor que sopla para el fútbol español. Ellas sueñan con ser, como los mayores, campeonas del Mundo. La cita con la historia es esta madrugada (01:00, Eurosport) ante Japón, la selección que ha deslumbrado y ha batido todos los récords en este Mundial: pleno de triunfos y 21 goles a favor y solo uno en contra. Será en el estadio Nacional de San José, en Costa Rica, con capacidad para 34.453 espectadores. Habrá lleno ya que las entradas se agotaron hace días.

Las chicas de la Sub-17, vigentes subcampeonas de Europa, llegan a esta final con ganas de revancha. En su debut en este Mundial cayeron por 0-2 ante su rival de hoy, en un partido en el que España no mostró su verdadera identidad. Meses antes, las de Jorge Vilda acariciaron la gloria en la Eurocopa en una final que Alemania empató a falta de cuatro minutos para el final y en la que acabó imponiéndose en los penaltis.

España se aferra a la calidad y a la garra de sus jugadoras para hacer frente a una selección con fama de intratable y cuyo equipo absoluto es el vigente campeón del Mundo.

La Sub-17 no empezó bien, pero a medida que ha ido avanzando en este Mundial ha ido a más. Ha demostrado tener argumentos de sobra para soñar con derrotar a las Nadeshiko, flor que da nombre a las japonesas. Para ello, deberá hacer frente a una Japón extremadamente ordenada y, sobre todo, rapidísima. La anticipación, las jugadas de estrategia y aprovechar las ocasiones deberán ser los mejores antídotos de las españolas. Las chicas de la Sub-17 quieren ser, como los chicos, campeonas del Mundo y para conseguirlo emplearán sus mismas armas, el fútbol de toque, seña de identidad del fútbol español.