Betis - Real Madrid
Leo Baptistao disputará su segundo 'derbi' del año
Leo ha sufrido un cambio de escenario radical, del colíder al colista, pero también su rol será muy diferente a partir de ahora: en el Betis es titular indiscutible.
Leo Baptistao, que apenas lleva una semana cedido por el Atlético en el Betis, jugará esta tarde su segundo derbi particular en sólo cuatro meses, pues de los poco más de 100 minutos que sumó en Liga con el conjunto rojiblanco, siete de ellos los pudo disfrutar al final de la victoria (0-1) que consiguieron los de Simeone en el Bernabéu, el pasado 29 de septiembre.
Leo ha sufrido un cambio de escenario radical, del colíder al colista, pero también su rol será muy diferente a partir de ahora: en el Betis es titular indiscutible desde antes de llegar, como demuestra haber salido de inicio ante Osasuna, 24 horas después de haber aterrizado en Sevilla. De hecho, fue el mejor jugador verdiblanco durante los 75 minutos que estuvo sobre el campo, aunque el resultado (1-2) hundiera al equipo de Heliópolis un poco más en la tabla, donde permanece como último y a siete puntos de la salvación.
“No me considero el salvador, pero creo que todavía tenemos opciones de permanencia y no vamos a arrojar la toalla”, afirmó el italo-brasileño horas después de la derrota ante los navarros.
El milagro. Los béticos sí ven en Leo el profeta capaz del milagro de la permanencia y se lo gritan por las calles de Sevilla en sus primeros días como futbolista verdiblanco. Pepe Mel ya quiso lograr su cesión el pasado verano, pero Simeone no dio su brazo a torcer. Ahora lo disfruta Garrido, uno de los principales valedores de su fichaje, que salvo problema físico volverá a confiar en él esta tarde como uno de los futbolistas capaces de cambiarle el paso goleador al equipo que menos tantos, 16 solamente, ha anotado de toda la categoría.
El pasado miércoles, en San Mamés, su rol de imprescindible quedaba marcado con otra nueva titularidad, esta vez en Copa y en San Mamés. Jugó acostado a la banda derecha y el Betis apenas si creó ocasiones de peligro, pero Leo volvió a dejar detalles de esa clase que le llevó este verano al Calderón por una millonada.
Y eso, el dinero, ha sido el único punto oscuro de su llegada a Heliópolis. Más allá de que en el Betis se le considere un jugador absolutamente necesario, las cifras de su fichaje, destapadas por AS antes de que se consumara, despertaron una polémica que no se ha apagado todavía. 2,3 millones de euros (1.250.000 para el Atlético, 850.000 de sueldo y el resto, en comisiones) parecen demasiado dinero por la cesión de un futbolista para sólo media temporada. “No me gusta hablar de esas cosas y en realidad se han dicho algunas mentiras, como que mi padre se llevaba parte del dinero. Yo estoy aquí para jugar al fútbol”, cerraba Baptistao el asunto.