Santi Mina da ventaja mínima al Celta para viajar a Bilbao

Seguro que Luis Enrique le dio permiso ayer a Santi Mina para que saliera a tomarse algo con sus amigos y terminara así la celebración del mejor cumpleaños de su vida. Por primera vez pudo entrar en una discoteca sin los reparos del quisquilloso portero de turno. Ya es mayor de edad. Futbolísticamente, creo que el punta ya había adquirido antes esa madurez. Ante el Athletic demostró unas aptitudes impropias de un chico de su edad.

El regalo se lo entregó en mano Gurpegui y el niño, ya no tan niño, no desaprovechó la oportunidad. Tuvo que batallar con Herrerín y la fortuna también le guiñó el ojo, pero Don Santiago (así habrá que llamarle a partir de ahora) consiguió su propósito. El tanto puede tener su peso en oro, ya que supone una importante ventaja de cara al partido de vuelta.

El partido empezó frío. De hecho, hubo que esperar veinte minutos para ver la primera acción de peligro. Sergio desactivó los disparos de Herrera y Muniain tras un buen servicio de Toquero. Los vizcaínos pusieron ayer mucho corazón, sobre todo en la primera mitad, pero echaron demasiado en falta el cerebro de Ander, desaparecido durante toda la noche. Antes del descanso San José perdonó el 0-1 y Herrerín aplazó la fiesta de Mina al imponerse en un mano a mano.

En la reanudación, el Celta apretó el acelerador y su velocidad de juego desbordó a los de Valverde. Muniain se echó entonces el equipo a sus espaldas. Cada vez que tocaba el balón, creaba peligro, pero entre la falta de puntería y Sergio evitaron el gol. Era la noche de Mina y parecía estar escrito. Herrerín realizó una buena estirada tras un gran cabezazo del canterano.

Posteriormente, el propio Santi evitó sin querer el tanto de su compañero Álex. Al final, llegó el regalo de Gurpegui y Balaídos le cantó el cumpleaños feliz en una emocionante fiesta por sorpresa. La celebración del público fue completa cuando entró Bermejo, que volvió a jugar tras siete meses de lamentaciones.

Valverde apostó por Aduriz en el tramo final y el ariete estuvo a punto de responder con gol. Se revolvió bien de espaldas a la portería y armó un potente disparo con la zurda que obligó a Sergio a sacar su mejor mano. El Celta adquiere una renta mínima, pero interesante. El Nuevo San Mamés se estrenará en Copa con un atractivo partido de vuelta y con el Athletic obligado a ganar por dos goles de diferencia.