Barcelona
La agitada pretemporada del Barcelona trae contratiempos
Equipos como el Barcelona han realizado un periplo de viajes, actos y amistosos sin el nivel que un equipo como el Barça necesita a estas alturas de la pretemporada.
La pretemporada tiene una serie de objetivos que bien cumplidos pueden ser fundamentales para la consecución de los objetivos de un equipo. El primero de todos es conseguir la adecuada preparación física del jugador para que pueda afrontar la larga y dura temporada con pleno rendimiento en el plano físico. El segundo es el aprendizaje, memorizacion y automatización de los mecanismos técnico-tácticos que el entrenador quiere llevar a cabo durante la temporada. Y, finalmente, para el mutuo conocimiento de los nuevos integrantes de la plantilla mediante la convivencia diaria. Todo ello va a redundar lógicamente en una mejor adaptación a los mecanismos de prevención de las lesiones, y que los componentes físico y emocional estén más equilibrados. Sin embargo, en los tiempos actuales, en los que los presupuestos de las plantillas son tan disparatados, los aspectos económicos priman sobre los aspectos deportivos, con el objetivo de generar los recursos económicos suficientes para poder hacer frente a esos galácticos fichajes y presupuestos tan descabellados.
Y así vemos cómo equipos como el Barcelona han realizado un periplo de viajes, actos sociales, beneficos y partidos amistosos sin el nivel deportivo que un equipo como el Barcelona necesita a estas alturas de la pretemporada. Todo ello unido a una falta absoluta de planificación de entrenamientos adecuados, provocando un cansancio, agotamiento y falta de ilusión en los componentes de la plantilla, que públicamente han manifestado que es lo que hay y que ellos son trabajadores y la empresa es la que manda.
El ejemplo contrario es el Real Madrid, que este año sí ha realizado una pretemporada un poco más correcta dentro de las exigencias económicas, que le vienen impuestas por su elevado presupuesto. Mejor que otras pretemporadas donde los miles de kilómetros en avión y las largas esperas en los aeropuertos eran la tónica del verano. Este año, en cambio, ha tenido más tiempo para la planificación física y para el acoplamiento técnico-táctico. Aunque con la ausencia de algún jugador clave. El club madrileño inicia esta temporada en mejor condición física e incluso anímica que el Barcelona, factores ambos de primordial importancia, ya que un mal arranque liguero puede incidir de manera significativa en el resultado final de la competición, en la que la parte física, psicológica y la prevención de lesiones juegan un papel fundamental.