Europa espera con ansias la llegada del bicampeón

El tropiezo en el inicio de Liga ante el Atlético de Madrid debe ser una página ya más que pasada para Unai Emery y su tropa, que esta noche afrontan su último escalón antes de regresar a la anhelada fase de grupos de la Europa League, objetivo prioritario de la temporada y para el que se ha conformado una plantilla amplia y repleta de alternativas en todas las posiciones para afrontarla con garantías.

Las bajas en la defensa no sirven de excusa para un Emery que pretende resaltar las virtudes que se vieron el domingo ante un Atlético mucho más hecho. Presión adelantada y minimizar las pérdidas de balón son las claves de un Sevilla que volverá a tener en su línea de mediapuntas y en su delantera, en la que Gameiro apunta a titular, sus bazas para lograr una buena renta para el partido de vuelta.

Europa ha dado mucha gloria al Sevilla. Llenó sus vitrinas de trofeos y para la UEFA el conjunto hispalense sigue siendo uno de los favoritos. Nada queda de aquel equipo que maravilló al Viejo Continente durante dos temporadas consecutivas, pero sí se ha conformado una plantilla hambrienta de gloria que debe poner sobre el terreno de juego las ganas y la calidad necesarias paras pasar de ronda.

Respeto. El Slask, aunque es inferior al Sevilla, es respetado en Nervión ya que no eliminó al Brujas en la ronda anterior por casualidad. Con el calor de la afición sevillista y siendo protagonistas del choque, los de Emery están obligados a conseguir una buena renta que les permita ir tranquilos a Polonia en siete días.

Al Sevilla le toca volver a sacar brillo al respeto ganado antaño para que se conserve.