Vuelve el EuroBetis de Pepe Mel

La imagen, las sensaciones e incluso, aunque adverso, el resultado cosechado en el estreno en el Santiago Bernabéu llenan de esperanza la décima aparición histórica del EuroBetis, que vuelve a exhibir sus colores (aunque hoy, por coincidencia con el rival, serán celestes) y su viajera afición esta tarde, con el estadio Strelnice de la República Checa como escenario principal. Enfrente estará el Jablonec, modesto conjunto incluso en el país de la Bohemia y cuya historia continental puede calificarse también de breve y poco florida. Viene de derrotar al Stromsgodset noruego en la Q3 del torneo, pero si impide a los verdiblancos el pase a la de grupos de la Europa League cabría titularlo aquí como "desastre" y allí como "sorpresa". Muestra: el fin de semana pasado, en su Liga, el Jablonec empató a cinco contra el colista y su propio entrenador calificó de vergonzosa la actuación de sus pupilos.

Mel dispondrá un once con mayoría de los que brillaron en el estreno liguero, de hecho la convocatoria de 20 que viajó ayer sólo contenía una novedad, Salva por Juanfran. En el sitio del extremo madrileño entrarán Vadillo o Juan Carlos y en el lateral diestro podría hacerlo el alemán Steinhöfer, que cumpliría así su debut oficial. Sara, meta argentino, también alberga opciones de estrenarse, además de Jordi Figueras, que podría entrar en el centro de la defensa para dar descanso a un Paulao con el que hay que ir dosificando sus esfuerzos.

Donde no se esperan cambios es en un centro del campo que funcionó a las mil maravillas y en el que Nosa y Verdú demostraron que se pueden echar a las espaldas, con total seguridad, la ardua labor de ser los creadores de juego del nuevo proyecto del Betis de Mel.

Rival. El Jablonec no tiene estrellas, pero su entrenador, Roman Skuhravy que no deja a nadie indiferente con sus declaraciones y que no hay que  confundir con Tomas, aquel espigado delantero internacional checo, apellidado igual, promete "guerra", virtud característica del fútbol y de la selección nacional de aquel país. A Chequia, por cierto, la dirige Michel Bilek, ex centrocampista que jugó junto a Pepe Mel en aquel Betis "ascensor" de principios de los 90. Los tiempos han cambiado: este club verdiblanco, este Mel, se han ganado el derecho a tener un sitio en Europa y a partir de esta tarde toca demostrarlo.