Lorenzo Sanz: "La sombra de Vicente es muy alargada..."

¿Por qué echó mano usted de Del Bosque?

Cesé a Toshack por lo del cerdo volando. Fue inadmisible, y cuando un técnico hace algo inadmisible estás obligado a actuar. Y pensé en Vicente.

¿Era su única opción?

Ya había pensado en él antes porque los dos coincidimos la friolera de diez años yendo a ver fútbol a la Ciudad Deportiva, cuando yo era directivo con Ramón Mendoza. Le tenía una gran estima y sabía de su conocimiento y sabiduría. En aquella época Molowny era el encargado de la cantera y Vicente su segundo, y al marcharse El Mangas se quedó él...

¿Y qué pasó esa primera vez?

Fue cuando cambié de Heynckes a Hiddink. Pero alguien a quien pregunté del club me dijo que Del Bosque prefería seguir en la Ciudad Deportiva. En la segunda crisis, tras lo de Toshack, me dijeron lo mismo y yo pensé: "Esto ya no cuela". Y fui a hablar con él.

¿Qué le dijo?

Que entendía que le gustara el fútbol base, pero que creía que podía ser un gran entrenador. No sé si le convencí o él me convenció a mí. Pero tuve la suerte de encontrarle. Y esa temporada, tan complicada, ganamos la Octava. La misma mañana antes de jugar en París me reuní con todo su equipo y les dije que estaban renovados.

¿Qué vio en él?

Su clave era su saber estar. Yo he oído hablar de que si era flojo, que si no tenía carácter... Pues lo tenía todo para ser entrenador del Madrid y lo demostró, como ahora con la Selección. Hay poco más que decir. Esta temporada ha sido proclamado mejor técnico del mundo.

¿Por qué cree que prescindió de él Florentino?

Hubo un incidente en la celebración de aquella Liga. Algún problema con Hierro y otros que yo desconozco, pero sinceramente, creo que Del Bosque podía haber seguido.

¿Qué buscaba Florentino?

Era la etapa de los Galácticos. Habían venido todos menos Beckham, que llegó ese verano. La verdad es que, como plantilla, era inigualable...

¿Pudo pensar el presidente que con tanta estrella el entrenador era lo de menos?

Pues sí... Es verdad. A esos jugadores se les podía decir poco. Como ahora a Cristiano, Özil y compañía. Tiene que ser complicado para un entrenador. Pero la virtud de Del Bosque fue precisamente esa, que hizo un equipo de tanta estrella. Sabía unir a todos, hizo plantilla. Ese también fue mi éxito. Fuimos campeones de Europa en 1998 y luego en 2000 con siete jugadores diferentes. Y con esa base y dos o tres grandes fichajes más se ganó la Novena. Luego se fue Del Bosque y se deshizo todo. Pero yo comprendo esa tentación del presidente. La enumeración de estrellas era increíble: Casillas, Roberto Carlos, todos los galácticos, Raúl...

Y el entrenador sin corbata.

(Risas). Puede que no diera el perfil. Yo escuché comentarios que no me gustaron, como que aquel Madrid era un Ferrari conducido por un taxista...

¿Es una frase de Florentino?

No, creo que se le atribuyó a Valdano. Era una frase innoble.

¿Qué valoración hace de los diez años sin Del Bosque?

Desde que se fue se han ganado tres Ligas y una Copa, y dos de las Ligas fueron con Calderón. El bagaje con Florentino no ha sido bueno, no. Pero no será por no tener a los mejores jugadores del mundo. Es que te dicen que esos jugadores no van a ser campeones y no te lo crees. Trajeron al que decían que era el genio de los banquillos, Mourinho, y, o no se hizo con el vestuario, o no sé...

¿Qué lugar ocupa Ancelotti en este proceso?

Es el undécimo técnico en diez años desde Del Bosque. Su objetivo ha de ser el mismo que el que logró Vicente, controlar la vanidad de las estrellas y hacer equipo. Yo gané en cuatro años y medio dos Copas de Europa, una Liga y la Intercontinental.

¿Con cuántos técnicos?

Con Capello, Heynckes, Hiddink, Toshack y Vicente...

¡El que esté libre de pecado que tire la primera piedra!

¡Y entre medias tuve casi firmado a Camacho! Lo tuve hasta presentado antes de la firma. Quería que siguieran los que venían con él si era destituido y yo le dije que no. Y dijo: "Pues entonces no firmo". Y le dije: "Pues no firmes". Y no firmó. Imagínese el coste para un presidente de cara a la afición.

Siendo Ancelotti una apuesta tan personal de Florentino: ¿si sale mal las miradas se dirigirán hacia él?

Es que ningún entrenador te asegura títulos. Si yo siempre digo que Florentino está buscando lo mejor para el Madrid, porque también es lo mejor para él. Otra cosa es que acierte. Yo a Ancelotti lo conozco más de jugador (risas). A ver cómo ganas a esos equipazos que hay por ahí en Alemania e Inglaterra. Y que nadie piense que ganar una Copa de Europa es fácil, que ya vamos para doce años... En estos diez, la sombra de Del Bosque es muy alargada. Por algo será. Pero él es madridista por encima de todo. Y es un hombre de bien que ha estado 36 años en el Madrid. Y eso marca a una persona. Intuyo que su historia no ha terminado aquí.