Un portero aficionado juega con una bala alojada en el cráneo

Algo inaudito sucedió en un partido amateur disputado en Sarajevo. Duško Krtalica, cancerbero de un equipo aficionado que disputaba un partidillo en el barrio de Boljakov Potok, no sabía que el dolor de cabeza que no le impidió abandonar el campo, al parecer por un choque contra el poste, iba a estar motivado por un balazo en la cabeza. Así lo asegura el diario Dnevni Avaz.

Y es que Krtalić aguantó todo el partido en el terreno de juego, incluso sólo recibió un gol, pero después empezó a sentir una rigidez en la mano y dificultad al hablar por lo que decidió ir al hospital. Allí los médicos alucinaron al ver una bala de 9 milímetros alojada en el cráneo de Duško y rápidamente fue trasladado la planta de neurocirugía para extraerla de forma exitosa.

Mientras Duško Krtalica evoluciona de forma favorable, la policía no ha cesado en sus investigaciones para saber cómo pudo terminar una bala en el cráneo de un futbolista amateur. Y quizá lo más increíble: ¿cómo aguantó un partido entero sin darse cuenta? La policía de Sarajevo sólo ha podido resolver la primera pregunta. Ese día se celebraron al menos tres bodas en el barrio de Boljakov Potok y en una de ellas alguien tuvo la genial idea de celebrar el enlace pegando tiros al aire. Y la mala suerte se cebó con Duško Krtalica al recibir el impacto de una bala perdida.

El diario Dnevni Avaz añade que la policía peinó la zona y encontró doce casquillos. Todos fueron examinados por un experto en balística y horas después se detuvo a Sejno Ligat, un hombre de 42 años que el día anterior había asistido a la boda.