Eriksen rescata a Dinamarca frente a una rocosa Georgia

Un golazo de falta directa de Eriksen a dos minutos del final le dio un trabajado triunfo a Dinamarca frente a una rocosa Georgia, rival de España en el grupo de clasificación, que a punto estuvo de amargarle la noche al equipo local.

En su única ocasión clara en todo el partido, la modesta Georgia se puso por delante, y a base de orden y sacrificio le planteó un partido áspero a Dinamarca, que se tomaba este amistoso como ensayo para el partido contra Armenia, en el que sólo le vale ganar.

Dinamarca tuvo un dominio estéril en la primera parte: suya fue la posesión, pero jugó atrancada, demasiado previsible. El equipo georgiano se mostró como un conjunto limitado, pero que suple con disciplina y voluntad sus carencias. Tirada atrás, Georgia, que veían de perder 4-0 frente a Irlanda en otro amistoso, no tuvo mucha salida, salvo algún destello de Ananidzi y el trabajo del incansable Kobakhidze.

Un tiro desde fuera del área de Khizanishvili tras un mal despeje de Cornelius que sacó con una buena mano Andersen fue la única ocasión clara de los georgianos. Dinamarca tuvo un par. La primera, a los tres minutos, la mandó fuera el lateral Poulsen. La segunda, nacida de un elegante taconazo de Eriksen, la mandó a las nubes Cornelius en posición franca.

Tampoco el obligado cambio por letisión del medio Zimling por el creativo Schöne ayudó a aclarar el juego de Dinamarca, sin la pareja de centrales titular -Kjaer y Agger- y sin Bendtner, sancionado por la Federación Danesa tras su úlmo episodio de alcohol al volante. Lo mejor de esa parte fue el desparpajo en la banda izquierda del debutante Braithwaite, del Esbjerg danés.

Krohn-Dehli salió al descanso para crear juego, pero fue Georgia la que sorprendió con gol de Dzaria, solo ante Andersen. El centrocampista del Celta contribuyó a la mejora danesa, pero eso no se traducía en ocasiones. Dinamarca acababa chocando frente a la rocosa Georgia, que se defendía por acumulación, pero también con sentido y con solidaridad.

Olsen metió a Pedersen y se la jugó con dos hombres arriba, pero su equipo se veía impotente. Y a la desesperada, puso también al gigantón delantero Makienok por el lateral Poulsen. Fue sin embargo un regalo en un despeje fallido del portero Loria lo que propició el gol de Pedersen, el primero en diez partidos con la absoluta, resultado de un buen tiro de volea a puerta vacía. Y en otra opción aislada, una falta al borde del área, apareció Eriksen para salvar a Dinamarca, que dejó una imagen preocupante.