Abidal y Tito Vilanova levantan la moral del vestuario culé

En el fútbol, lógicamente, la forma física es primordial. Pero la parcela psicológica también juega un papel importante. Sirva como ejemplo el Barcelona: el conjunto azulgrana se atoró entre los meses de febrero y marzo -ello le costó la eliminación en la Copa del Rey y un susto de los gordos en la Champions frente al Milán- más por una cuestión anímica que física. El equipo notó más que nunca la ausencia de su líder, Tito Vilanova. Y eso se dejó sentir sobre el campo, a nivel de juego e, incluso, de actitud.

Sin embargo, el vestuario culé ha experimentado un subidón de moral con los regresos primero de Tito y, el sábado, de Eric Abidal. La vuelta del francés ha hecho olvidar, incluso, que Leo Messi está lesionado y que el equipo deberá afrontar la vuelta de cuartos de la Champions ante el PSG (2-2 en la ida) con su gran estrella entre algodones. Se declara el estado de optimismo en el Camp Nou.

Una opción más. Además, más allá del impacto anímico está el deportivo. Abidal tiene el alta médica, está tratando de alcanzar el mismo tono físico que sus compañeros y, por lo tanto, se convierte en una opción más para la defensa en el tramo decisivo de la temporada. Ante el Mallorca tuvo los primeros minutos desde su trasplante. Veremos si ante el PSG goza de algunos más.

"Mientras calentaba pensé en no lesionarme"

La del sábado fue sin duda la noche de Abidal. Deportiva y mediáticamente hablando. El francés concedió varias entrevistas al término del partido cuyo denominador común fueron la alegría y el buen humor (algo que jamás ha perdido en todo este proceso). "Cuando estaba calentando en la banda tan solo pensaba en no lesionarme mientras calentaba". Abidal hacía semanas que pedía con insistencia volver a disputar minutos, pero el cuerpo técnico ha preferido ser cauto con respecto a su reaparición. Quizás esas ansias por volver responden a la siguiente afirmación, hecha por el defensa en una entrevista concedida a la web del Barcelona: "No quería acabar mi carrera deportiva sin jugar al fútbol. Este deporte es mi vida y he luchado mucho por volver a jugar. Si me encuentro bien, me gustaría seguir jugando una o dos temporadas más". Abidal ya ha hecho lo más difícil: volver a disputar minutos con el Barcelona tras someterse a un trasplante de hígado.