El Villarreal vuelve a golear y el ascenso directo se pone a tiro

El Villarreal goleó por 6-1 al Numancia de Soria y parece lanzado hacia la Liga BBVA, tras ampliar a once las jornadas que lleva invicto y sumar once goles en sus dos últimos partidos.

El Numancia se presentaba en El Madrigal con buenas credenciales, tras no haber perdido en sus ocho últimos partidos, pero la pegada del conjunto de Castellón desarboló por completo al conjunto soriano, muy endeble en defensa. La primera parte fue vibrante.

Villarreal y Numancia de Soria demostraron que venían con fuerza y ganas. Sobretodo el equipo local, que antes de alcanzar el cuarto de hora ya dominaba por 2-0, gracias a los goles de Jeremy Perbet y Canteranos.

Parecía que el Villarreal había encarrilado el partido, pero el Numancia reaccionó. Aunque llegaban poco, los de Machín seguían peleando y buscando peligro en alguna jugada que le diera vida.

Esa opción no llegó hasta casi el minuto cuarenta, en la que Pedro Martín no perdonó una asistencia perfecta de Cedric, tras una gran jugada de su equipo. El gol dejaba el partido muy abierto y con la sensación de que en la segunda parte todo podía ocurrir.

En la reanudación, de nuevo el Villarreal sorprendió a su rival y cuando apenas había transcurrido un minuto de juego, Gerard Moreno marcaba el tercer gol. Pero el Numancia no bajaba el ritmo y seguía metido en el partido. Los visitantes mantenían un ritmo alto de juego y de presión, por lo que el partido seguía manteniendo su interés.

El Villarreal manejaba sus opciones y esperaba encontrar opciones a la contra, con la velocidad de sus jugadores arriba. Pasaban los minutos y mientras a los locales les costaba enganchar una contra que pudiera sentenciar el partido, al Numancia no le servía su dominio para crear peligro.

Todo acabó en el minuto ochenta cuando un centro el área era rematado por Musacchio y el balón tocaba en el brazo de Regalón, lo que el árbitro interpretó como penalti. Perbet anotó la pena máxima y el Numancia se diluyó como un azucarillo. El Villarreal puso la directa y pasó por encima de un rival con los brazos bajados que recibió dos nuevos tantos en los minutos finales del partido.