Jiménez: "La eliminatoria está dividida al cincuenta por ciento"

El entrenador el Real Zaragoza, Manolo Jiménez, ha señalado hoy que la eliminatoria de cuartos de final de la Copa del Rey que le enfrenta al Sevilla y que se decidirá mañana en el encuentro de vuelta, está "al cincuenta por ciento".

"Vamos a intentar pasar la eliminatoria porque sería muy bonito lograrlo, pero está difícil", ha añadido el técnico andaluz.

Jiménez, que tiene que afrontar el encuentro con varias bajas que le han obligado a convocar hasta cuatro jugadores del filial, ha reconocido que en un equipo como el Real Zaragoza se notan "muchísimo" las ausencias y que si le quitan tres o cuatro futbolistas baja muchísimo el rendimiento.

Una de estas ausencias es la del creador de juego zaragocista, Apoño, para quien, según su técnico, no tiene un recambio del mismo perfil que le pueda sustituir porque el único que lo podía hacer era Romaric, que se encuentra disputando la Copa de Africa y que tampoco ha dado el rendimiento esperado.

"Tendremos que cambiar la forma de jugar o reinventarnos", ha destacado el entrenador de El Arahal, que ha avisado que frente al Sevilla solo jugarán los que estén "al máximo nivel físico y psíquico" porque ha advertido que hay veces que la reiteración de partidos hace coger a algunos jugadores un ritmo cansino que no es el adecuado.

"El cuerpo aguanta lo que aguanta. Hay jugadores fueras de serie, y los de los equipos grandes, que están acostumbrados a jugar miércoles y domingo y luego hay otros a los que les supone un desgaste increíble. Quizá nosotros tenemos jugadores que se desgastan mucho y pagan los esfuerzos", ha recalcado.

Manolo Jiménez cree que a su equipo le está pesando el duro mes de enero y que el cansancio psicológico influye mucho, y más si los resultados no son positivos porque opina que la fatiga se supera más fácilmente con victorias.

Sobre su vuelta al Ramón Sánchez Pizjuán ha subrayado que va a ser "especial" pisar el césped y no hacerlo como sevillista, pero que cuando empiece a rodar el balón se olvidará de su pasado y que remará para intentar ganar la eliminatoria.