El Sporting, a evitar la venganza gerundense

Los once futbolistas del Sporting saltarán hoy a Montilivi con una idea clara de lo que tienen que hacer sobre el terreno de juego: seguridad atrás y movilidad arriba. Algo que podría valer para cualquier partido de los asturianos fuera de casa, pero que se acentúa hoy, en vistas de los resultados de ambos equipos. El Sporting no ha logrado ganar fuera (tan sólo suma un punto de nueve posibles) mientras que el Girona, con Dani Mallo imbatido en su feudo, tan sólo ha cedido un empate a cero ante el Sabadell. Dos dinámicas opuestas, que radicalizarán si cabe las apuestas de sus entrenadores. Manolo Sánchez apostará por un doble pivote de corte defensivo con una clara misión: parar a Jandro. En Gijón saben de la calidad y la importancia del asturiano en el juego del Girona, y Sánchez está preocupado, quizás en exceso, por el mediapunta. Sus bazas para frenarle son Mandi y Alex Barrera.

Sin miedo. El Girona, por su parte, variará lo mínimo el equipo que cayó derrotado en Córdoba la pasada semana. Las bajas de Jofre y David García son sensibles, pero el equipo tiene hombres de sobra para suplirlos. El buen momento de Felipe Sanchón, así como el del ya mencionado Jandro, dan al equipo un toque, si cabe, más ofensivo. Si a eso le sumamos el apoyo del público, ilusionado como hace años que no se veía, y la confianza y seguridad que está ganando Pere Pons, el conjunto que dirige Rubi se convierte en uno de los más difíciles de batir en su feudo. Con un juego vistoso y de combinación, el Girona tratará de llevar la iniciativa del juego, algo que presumiblemente el Sporting permitirá. Los gerundenses buscan su 'vendetta'