Liga BBVA | Zaragoza
"Fue un reencuentro bonito, pero el sábado viene otra final"
Movilla volvió a jugar en La Romareda cinco temporadas después, pero no quiso detenerse en la anécdota ya que prefiere priorizar las necesidades del equipo: "Hay que ser consciente de las dificultades".El Pelado no se ve como "abanderado" ya que lo correcto es "predicar con el ejemplo". Por eso, es claro sobre sus opciones de jugar: "Llegué a última hora, he de ganarme el puesto".
El emotivo regreso de José María Movilla a La Romareda, ejecutado en una atronadora ovación, queda ya a un lado. O al menos esa es la impresión que transmite el jugador con sus declaraciones. Si después del partido no ahondó en exceso en su figura y emociones, su paso por la sala de prensa de la Ciudad Deportiva siguió el mismo sendero. ¿Qué sintió en el debut? "Fue un debut soñado, muy bonito para un jugador que quiere al Zaragoza, pero ahora debemos pensar que tenemos otra final el sábado". Eso es todo. Así es él.
Movilla prefiere mirar al futuro deportivo del equipo y no detenerse en detalles que poco ayudan en lo futbolístico. La situación sigue exigiendo lo mejor al equipo. "La victoria del otro día no sirve de nada, es sólo un pasito hacia adelante que necesitábamos. Este equipo sigue esperanzado en el trabajo que está realizando, que es bueno y espero que nos permita seguir sumando", dijo.
En este sentido, el jugador madrileño espera poder ser una ayuda al equipo, aunque para poder alcanzar ese momento asumen que debe seguir mejorando para superar la rémora que le supone llegar con el mercado ya cerrado: "No sé qué rol puedo tener. He llegado a última hora y me tengo que ganar el puesto, como me lo tuve que ganar en su día. Es una pelea que se produce cada año porque nadie regala nada".
En este sentido, el Pelado no se considera un jugador de referencia dentro de este Zaragoza. Todo lo contrario. "No puedes venir de abanderado de nada, lo que hay que hacer es predicar con el ejemplo. Ni a las estrellas les aseguran un puesto, lo estamos viendo en el Madrid y lo vemos en muchos otros equipos".
En construcción. Ese discurso serio lo basa Movilla en la difícil realidad que le toca vivir a la entidad aragonesa esta temporada. Una perspectiva que no debemos perder según el jugador. "Hay que ser conscientes de las dificultades que vamos a tener. Es muy difícil para un entrenador tener tantos fichajes, tantas incorporaciones que no han hecho la pretemporada, jugadores con los que no se contaba para la primera plantilla y se están convirtiendo en piezas importantes... Todo está cogido con alfileres y se está ordenando con la mano del entrenador", recordó.
El Pelado insiste especialmente en la idea de formar un grupo, algo en lo que otros equipos les aventajan: "No digo que los jugadores del Zaragoza no lo sepamos, pero es algo más complicado hasta que la gente se mete en la dinámica de la ciudad, de la afición, de lo que es el Zaragoza... Sobre todo deben sentir lo que es el Zaragoza, que sea como su último equipo, el de toda la vida. No como algo pasajero".
Ligado a eso, Movilla encuentra algunas diferencias en esta nueva etapa en La Romareda. "Antes un cambio de orientación no se aplaudía. ¿Por qué? Porque la afición del Zaragoza era una afición exigente, a la que le gusta el fútbol y que se ha sentido ganadora", concluyó.