Un genial Oscar no fue suficiente para derribar a la Juve

El Chelsea empató a dos ante la Juve un partido que tuvo ganado pero que pudo acabar perdiendo. Se evidenció una vez más que su centro del campo no sabe controlar el juego, ni con 2-0 a favor, y quedó constancia de que sus esperanzas están en la mediapunta. Muchas veces fue Mata, en la Premier está siendo Hazard y ayer, en Champions, Oscar se erigió en figura.

El brasileño marcó dos goles en dos minutos. En el 31', adelantó al Chelsea con un disparó que engañó a Buffon tras golpear a Bonucci y dos minutos más tarde sacó su gen brasileño. Bailó una samba entre Bonucci y Pirlo, se giró sobre sí mismo y, desde la frontal, teledirigió el balón al fondo de las redes. Vidal acortó distancias y, ya en la segunda mitad, Quagliarella empató tras batir a Cech por debajo de las piernas. El propio delantero pudo rematar la faena pero lo evitó la cruceta. Mata dejó detalles y Torres, que empezó fiero, fue de más a menos.