El tridente de ataque y uno más: Morata

Si en la primera parte Higuaín y Di María se bastaron para reventar el partido, en la segunda brilló el tridente Cristiano, Özil y Benzema. Un ataque en el que se coló Morata, volcado a la derecha (al contrario que en el Castilla del ascenso, en el que partía desde la izquierda), y en el que Cristiano ofreció una nueva versión buscando con mayor insistencia de la que es habitual en él entrar por la derecha. Es una zona que nunca suele habitar en ataques estáticos durante la temporada, sólo en transiciones rápidas.

Esto provocó una sucesión de movimientos en varios jugadores, principalmente de Benzema, que calcó hasta cuatro veces una diagonal de izquierda a derecha buscando portería (partiendo del hueco que dejaba vacante el portugués). Su cuarta internada dibujando esa diagonal (imagen 3) terminó en gol de Jesé, después de que el francés hiciera una pared con Khedira y pasara en profundidad a Özil. Aún está por ver si Cristiano visitará más la banda derecha (dos ejemplos en las imágenes 1 y 2) esta temporada o sólo intentaba echar una mano a Morata en esa zona. Y Benzema confirmó que sigue en un gran momento, con una movilidad extrema que le permite asociarse con todos los elementos del ataque blanco.

Mourinho sacó un equipo diferente en cada tiempo, los dos más que solventes (hay plantilla de sobra). Lass y Xabi Alonso como mediocentros en la primera mitad y Khedira y Granero en la segunda. Este último (33 pases buenos y cuatro recuperaciones por los 45 y dos de Xabi) estará por detrás de Modric para esa posición cuando fiche el croata.