Final de la Champions | El gran protagonista
Drogba: de irse en enero a China a héroe en Múnich
"Esto estaba escrito y creo en el destino", apuntó anoche
Lo que hemos conseguido esta noche en Múnich es lo que he perseguido durante años. Llevo aquí ocho temporadas y cuando eres jugador del Chelsea nunca debes darte por vencido hasta el final", afirmó ayer sobre el césped de Múnich después de proclamarse campeón de la Champions. El pasado 16 de diciembre el periódico inglés The Sun publicó que Didier Drogba estaba a un paso de aceptar una oferta de 12 millones de euros anuales del club chino Daelin Aerbin. Abramovich congeló la renovación de su contrato, pero finalmente, el delantero descartó seguir los pasos de Nicolas Anelka y se quedó en el Chelsea.
Drogba llegó en enero a Londres dolido por la derrota de Costa de Marfil en la final de la Copa de África, la segunda en la carrera de Didier en su historia. Con Torres en plena progresión, nadie apostaba por la titularidad del africano. Drogba nunca fue un jugador cómodo para el club. Al arrancar la temporada 2007-08, cuestionó la salida de Mourinho. Se cuenta que lloró cuando le comunicaron que el portugués abandonaba el club: "La salida de Mourinho destruyó una cierta familiaridad que teníamos en el club. Ahora tenemos que olvidar esos sentimientos y encontrar otra fuente de motivación". A raíz de estas declaraciones, Drogba dijo a France Football: "Quiero dejar al Chelsea. Algo se ha roto con el Chelsea, el daño es grande en el vestuario". Pero Drogba volvió a quedarse siguiendo el sueño que conquistó ayer en Múnich. "Creo en el destino. Lo que ha pasado esta noche estaba escrito. La vida es fantástica", concluyó anoche feliz.