El Racing vive una tensa espera judicial

Justo García Barros parece no tener tan claro como se suponía si declararse o no competente territorialmente para ver el caso de las medidas cautelares solicitadas por Cantur sobre el paquete accionarial del Racing que controla WGA, la empresa de Alí Syed. El magistrado parecía decidido de entrada a rebotar el caso a un juzgado de Madrid pero, in extremis, decidió escuchar el punto de vista de la fiscalía y, ampliado, el de la parte demandante. Al ser los dos coincidentes en cuanto a la procedencia de declararse competente, parece que han conseguido que García Barros medite aun más profundamente su decisión.

Al juez, hombre habitualmente afable y con fama de ser muy sólido y muy rápido en sus decisiones, se le está viendo estos días más tenso de lo normal en la sede judicial de Las Salesas. Fuentes jurídicas, habituales de aquellos juzgados, han asegurado a AS que la decisión de García Barros es ahora mismo el tema estrella ('trending topic' en la jerga actual) en las tertulias entre los profesionales del derecho que se reunen cada día en el centro neurálgico de la Justicia en Cantabria. No hay unanimidad en la opinión sobre qué decisión debiera adoptar el juez. La mayoría, en cambio, siguen creyendo que se declarará no competente. Solo el hecho de que no comunicara su decisión ayer mismo, tal y como se esperaba, enciende una luz de esperanza entre los seguidores racinguistas que algunos hay también en la judicatura de nuestra región y sus aledaños. Sería una gran sorpresa que el magistrado del juzgado de primera instancia nº4 de Santander no se pronunciara entre hoy y mañana.

Un clamor. Independientemente de la letra de la ley, que debe interpretar al juez, lo cierto es que en la sociedad cántabra hay un clamor, desde el presidente del Gobierno de Cantabria hacia abajo, animando a García Barros a entrar en el tema. Todo el mundo sabe que, por un problema de tiempo, tener que litigar en Madrid deja al Racing muy cerca de la desaparición a escasos meses de su centenario.