Sábado noche con Koné

Los extravagantes horarios están siendo uno de los items temáticos que han vertebrado esta Liga. Después de la bipolaridad Madrid-Barça, del Cristiano-Messi y del Guardiola-Mou viene este desmadre de fechas y horas que toca fondo esta noche provocado, por supuesto, por ese monstruo de tamaño mundial que es el clásico (y el post-clásico). El Sevilla-Levante arranca a las 22:30 horas cuando se anunció para media hora antes. JIM ha dicho que es una falta de respeto y Del Nido, menos beligerante, ha desvelado que a cambio se le han hecho "una serie de contraprestaciones" al Sevilla. Así que los clubes son esclavos de las teles, pero por suerte los futbolistas todavía tienen el balón para decir algo. Y hay mucho en juego en este partido de fiebre de sábado noche en el Sánchez Pizjuán.

El Sevilla llega después de su enésima depresión. Ridicularizado en Getafe, donde fue un muñegote zarandeado y dejó una imagen descorazonadora, tiene esperando en Nervión el último tren para pelear la zona europea, justo donde lleva instalado el Levante todo un maravilloso curso liderado un anti-mediático, JIM, que le ha jugado al Barcelona tan bien como el Chelsea de Di Matteo pero con menos suerte. El Levante, construido a retales, ya tiene el respeto del fútbol español pero su plantilla, veterana y futbolera, quiere más. Con tres puntos de colchón, cree que es un buen día para dar un golpe casi definitivo. Los focos apuntan a Arouna Koné, una de las sensaciones de la Liga a quien el Sevilla compró por 12 millones de euros en 2007, se hizo la triada en el verano de 2008 con su selección y, después de recuperarse, se la volvió a destrozar en una nueva cesión (Hannover). El Sevilla lo dio por imposible con lógica y lo cedió al Levante en su último año de contrato. La respuesta, 13 goles en Liga y 2 en Copa. Paradójicamente, la única cláusula que puso Monchi en el contrato establece que si marca 18 goles oficiales renovará automáticamente con el Sevilla. Con un gol en cuatro años, parecía una quimera que llegase a la cifra. Ahora se especula con las ganas que tendrá Koné de marcar dos goles más para ponerse en manos del Sevilla en vez de decidir por su cuenta su nuevo contrato...

Está por ver la reacción del sevillismo después del Waterloo del Getafe: si acudirá o no en masa al estadio y si arropará o rechazará a unos futbolistas decepcionantes que hoy se juegan la vida. Palop no ha llegado a tiempo pero sí vuelve a la lista Reyes, que antes de la lesión estaba en crecimiento. Babá ha pedido minutos de suplente después del amistoso en Polonia pero lo que quiere Míchel es orden e intensidad. Al Levante le falta Juanfran García, sancionado. Y tampoco se ha recuperado a tiempo David Navarro. El zaguero, con una sobrecarga en los isquiotibiales de su pierna izquierda, no viaja esta mañana con el resto de la expedición. Esta es la sobremesa del clásico. No es planetaria, pero tampoco es mal plan para la copa post-clásico.