Geijo, de cuarto delantero al mejor revulsivo de Abel

Cuando los futbolistas hablan en el campo poco más suelen añadir después. Álex Geijo fue reclamado por su entrenador cuando el partido frente al Athletic se complicó tras la expulsión de Jaime. Los de Bielsa apretaban y el Granada había trazado un plan que consistía en aguantar atrás, achicar espacios y contestar a la contra. Abel se acordó de Geijo y el hispanosuizo respondió con una gran segunda parte en la que anotó un gol, le anularon otro y siempre ofreció una salida.

Desde la aparición de Abel en la entidad de Los Cármenes, Geijo apenas ha tenido oportunidades y, una vez que llegó el brasileño Henrique, pasó a ser el cuarto delantero y un habitual de la grada. Las discretas actuaciones del resto de los artilleros parecían conceder una oportunidad al pichichi rojiblanco del año pasado (24 goles), pero seguía condenado a calentar banquillo. Tanto que muchos aficionados se preguntaban en las redes sociales si existen problemas entre Abel y el delantero como cuando coincidieron en el Levante hace algunas temporadas. La expulsión de Jaime originó una situación inesperada que acabó con una enorme actuación del '22' rojiblanco.

Impresiones. Geijo valoró de forma positiva el punto sumado ante el Athletic: "Hacía mucho tiempo que no marcaba y que no tenía tantos minutos de juego. Con el 2-0 lo vimos muy cerca. Fue una sensación agridulce". El Granada piensa ya en el partido en Zaragoza y "en poder dar un paso definitivo hacia la permanencia. Todos los que están ahí abajo ahora mismo firmarían estar como nosotros. La permanencia está en nuestra mano".