La intensidad conlleva un 20% más de faltas

El Atlético de Simeone hace un 20 por ciento más de faltas que las que se producían durante la era Manzano, lo que le trae como consecuencia un 45 por ciento más de tarjetas amarillas. En los tres partidos del argentino en el banquillo (Málaga, Villarreal y Real Sociedad) el equipo rojiblanco ha cometido una media de 21 infracciones por encuentro (63 en total). En cuanto a las tarjetas amarillas, la media es de 5,7 por duelo de un total de 17 amonestaciones. Por el contrario, los datos de Manzano se reducen hasta unas medias de 16,7 faltas y 3,13 tarjetas recibidas.

Simeone tenía las ideas muy claras cuando se hizo cargo del Atlético tras la destitución de Manzano y las puso en práctica desde el principio: intensidad, garra y un trabajo defensivo más duro. Prueba de que ha aplicado dichas ideas son esos números en sus tres primeros partidos de Liga.

La idea del nuevo entrenador es que todos participen en el trabajo defensivo: desde Falcao hasta los centrales. Y así, siendo un equipo solidario, es como han conseguido ser imbatidos en esta nueva etapa de los colchoneros. El argentino trabaja específicamente con la defensa durante muchas de sus sesiones. En ellas, insiste en la intensidad y la defensa en bloque, siendo ya ambas señas de su identidad.

Sanciones. El aumento de amarillas tiene sus consecuencias negativas. Así, Tiago se perdió el partido ante la Real Sociedad al cumplir ciclo de tarjetas y en el próximo encuentro liguero, ante Osasuna, ni Gabi ni Diego podrán participar al estar sancionados por el mismo motivo. Lo bueno es que el aumento de amarillas no ha significado un incremento en las tarjetas rojas. Ningún jugador del Atleti ha sido expulsado con el argentino. Manzano tampoco tenía un registro alto. Su media de rojas por duelo era de 0,13%, con dos expulsiones: Courtois y Godín, ambos contra el Madrid.