Molina
"Hiddink, Floro, Sacchi, Parreira, Antic, Jabo... Asimilé algo de todos"
José Francisco Molina, poco amigo de las entrevistas, atendió amablemente a AS para contar los motivos y su periplo hasta llegar al codiciado banquillo del Villarreal.
¿Cuándo sintió usted la llamada de los banquillos?
Sentí el gusanillo después de colgar las botas.
Pero ya había aprobado algún curso de entrenador.
Sí, los dos primeros los hice mientras jugaba en el filial del Valencia. Allá por el 92.
¿Ya tenía esta inquietud?
No. Quería tener más nociones de fútbol y me pareció buena idea apuntarme al curso junto a un grupo de compañeros del filial del Valencia.
¿Cuándo completó el último curso de entrenador?
Justo al colgar las botas, en la Ciudad de Las Rozas. Entonces sí me planteé la posibilidad de dirigir.
Y apareció el Villarreal.
Un sitio espectacular para ser entrenador con cuya filosofía futbolística estoy completamente identificado. Me gusta cómo se hacen las cosas, los medios de que disponen y la idea de juego que transmiten.
¿Cómo vivió sus dos primeros años como técnico del C?
Fueron dos años tranquilos. Aprendiendo, aunque siempre se está aprendiendo, y poniendo mis ideas en orden. Digamos que las cosas seguían su curso natural.
Y este año asciende al B y a mitad de temporada sustituye a Garrido. ¿Sintió vértigo?
Vértigo, no. Pero sí es cierto que ha sido todo muy rápido.
¿El Molina que dirigió al C es el mismo que se hizo cargo del Villarreal el 22 de diciembre?
Hay diferencias, porque hay una evolución. Y creo que además debe ser así. No soy el mismo técnico que hace dos años y espero no ser dentro de dos años el mismo que ahora. No hay que parar de crecer.
Afirmaba que se siente muy identificado con la filosofía de juego del Villarreal. ¿Cuál es?
Futbolísticamente apostamos por la posesión para usarla correctamente en busca de la portería rival. Y cuando la perdemos, la idea es ser agresiva y recuperarla lo antes posible. Luego hay otros aspectos básicos como la solidaridad y el compromiso. Cuando tenemos la pelota, atacamos los once; y cuando la perdemos, defendemos los once.
Ha jugado en Valencia, Villarreal, Albacete, Atlético, Deportivo y Levante. Equipos que practican estilos de juego distintos. ¿Se identifica especialmente con alguno?
Soy la suma de las experiencias que he vivido durante mi carrera. De lo aprendido en todas esas temporadas.
¿Hay algún entrenador que le marcase especialmente?
No podría destacar a uno en concreto. Hay de todo.
Floro y su psicología, la táctica de Sacchi...
Sacchi, que era muy pesado con la táctica, me enseñó mucho. Con Hiddink entrenábamos mientras estaba en el filial del Valencia. También tuve a Floro, Parreira, Antic, Irureta... Asimilé algo de todos. Repito que soy la suma de todo lo que he vivido.
No le marcó especialmente ningún entrenador, ¿pero lo ha hecho algún equipo?
¿Cómo un equipo?
La propuesta futbolística.
¿En el que haya jugado?
O la de un rival.
Me marcaron el Atlético de Antic y el Depor de Jabo. Equipos con los que gané títulos desplegando fútbol ofensivo.
¿Ese fútbol ofensivo de Atlético y Deportivo ha influido en su propuesta en el Villarreal?
Supongo que sí, claro.
Le pregunté a Irureta por sus posibilidades como técnico y me dijo que usted reúne condiciones para hacer una carrera larga: trabajador, humilde y observador.
Agradezco sus palabras.
Hay un buen número de porteros que acaban en los banquillos: García Remón, Marcel Domingo, Iribar, Zoff, Zenga... ¿Existe alguna razón?
Ni idea.
Lo intentaré de otra forma. ¿Ser portero ofrece alguna ventaja de cara a convertirse en técnico posteriormente?
Como portero, tienes una mayor vista periférica, dominas mejor los espacios y lees más rápido las opciones de juego desde atrás. Intentas ordenar a tus compañeros.
Molina era un portero moderno que jugaba adelantado, casi de libre, y de buen pie.
Achicaba porque el equipo achicaba. Entiendo que el técnico valoraba mis características y trataba de aprovecharlas.
Hoy se mide a un excompañero, Cholo Simeone. ¿Qué recuerdo tiene de él?
Bueno.
Eran miembros del núcleo duro del Atlético del doblete.
Amigos del todo no éramos, pero hemos compartido momentos muy felices e intensos. Guardo un gran recuerdo suyo. Pasamos buenos años juntos.
¿Cómo cree que será el nuevo Atlético de Simeone?
Imagino que tratará de transmitir ese carácter que él mostraba en el campo. Un equipo intenso, incómodo para el rival. Muy comprometido.
En su presentación dijo que "el esfuerzo no se negocia".
El esfuerzo no se negocia nunca. Ni en el Atlético, ni en el Villarreal ni en ningún sitio.
¿Qué rasgos del Molina jugador tiene el Villarreal?
Intento transmitirle mi personalidad, mi experiencia. Siempre fui una persona tranquila y les pido la tranquilidad justa. Porque quiero intensidad, ambición y máximo respeto al rival. Quiero que mi equipo tenga la posesión y cuanto menos la tenga el rival, mejor.
Muchos deportistas afirman que se crece más superando adversidades que alcanzando los éxitos. ¿Usted, que ha vivido momentos complicados en su carrera, opina así?
En mi carrera he conseguido éxitos, he fracasado y he tenido que superar obstáculos. Y de todo eso he aprendido. Soy el resultado de la suma de todo para bien o para mal.
¿Le preocupa que la filosofía de su equipo, posesión y fútbol asociativo, venga bien a un Atlético directo y conservador?
Me preocupa el Villarreal. Si mi equipo trabaja, presiona y se posiciona bien, el Atlético no estará cómodo. Oiga...
Diga...
¿Queda mucho?
Veo que le sigue gustando poco el contacto con los medios y las entrevistas. Hay cosas que no cambian.
No estoy cómodo porque cuando me veo, no me gusta cómo aparezco. Trato de llevarlo de la mejor manera posible, pero sí, me sigue sin gustar.
¿Recuerda la rueda de prensa en el Atlético en la que respondió a todo "no tengo nada que decir sobre ese tema"?
Sí, sigamos. Se me está haciendo larga la entrevista.
¿Qué opinión le merece el Balón de Oro que han concedido el pasado lunes a Guardiola?
Ninguna porque nunca creí en los premios individuales. No tienen ningún sentido.
¿Y el elogiado estilo de juego del Barcelona?
El fútbol evoluciona y uno debe sacar el máximo rendimiento a su plantilla. Ellos lo hacen, igual que el Villarreal, que ha apostado por una filosofía de juego y la implanta buscando los jugadores que mejor se adapten a ella. Pero también hay que diseñar un plan B como recurso, como alternativa en un partido o en momentos de un encuentro.
¿Qué vestuario encontró al hacerse cargo del Villarreal?
Triste, cabizbajo. Hemos intentado animarles. Incidimos en el factor psicológico para animarles, buscando que disfruten. Esa es la mejor forma de trabajar.
¿Se le puede enseñar a un jugador profesional algo?
Me retiré con 36 años y seguí aprendiendo hasta el último día. Pero es cierto que el margen de mejora es menor. Quizás algunas nociones en el terreno táctico.
Los jugadores hoy manejan mucha más información que cuando usted jugaba.
Mucha más. Y a todos los niveles: táctico, técnico, dietético, psicológico...
¿Son mejores los futbolistas actuales que los de su época?
Sí, los jugadores son mejores que hace diez años. Disponen de más información porque ha aumentado el grado de profesionalización y eso les hace mejores. Nosotros no disponíamos de tantos medios.
¿Y el fútbol es mejor?
No es cuestión de si es mejor o peor, el fútbol ha evolucionado. Ya no se juega como hace 20 años ni como hace 10.
Hace una semana Laureano Ruiz me dijo que no se valoraba la alternativa del marcaje individual porque está mal visto. Y Gentile afirmó que es la solución para frenar a Messi. ¿Valoraría un marcaje individual como un recurso?
Nunca he ordenado un marcaje individual, pero no descarto nunca nada. No sé si será la solución para frenar a Messi, pero ahora quien me preocupa es Falcao y Diego. En dos semanas tendré tiempo para plantearme cómo parar al Barça.
Relájese, hemos llegado a la última pregunta.
Ya era hora.
¿Qué sentirá al ocupar el banquillo rival del Calderón?
Será especial. Fueron cinco años y aún hoy recibo el cariño de los atléticos. Pero defenderé al Villarreal e iré a ganar.
Fin de la entrevista. Agradezco sinceramente que se prestase a pasar este mal rato.
Sabes que no es lo que más me gusta, pero entiendo que es tu trabajo.
Gracias y suerte José.
Gracias Fermín.